Los empleados de Popular figuran entre los principales afectados por la caída de Popular y su inmediata compra por parte de Santander. Además de que su puesto de trabajo corre un alto riesgo, en torno al 70%-75% de la plantilla era accionista del banco, con lo que ha perdido toda su inversión.

Durante las dos ampliaciones de capital que el grupo llevó a cabo en 2012 y el pasado mes de junio, por más de 5.000 millones de euros, la entidad "animó y, en algunos casos, coaccionó", a los trabajadores a respaldar las operaciones, según explican fuentes sindicales. Para ello concedió créditos a tipo de interés cero y anticipos de sueldo.

UGT, uno de los sindicatos presentes en Popular, ha remitido hoy un comunicado señalado que, en la primera reunión con Santander, ha solicitado "estudiar medidas para minimizar la pérdida de los empleados con anticipo para acciones".

"¿Cómo puede ser que el 70% de empleados y sus familias hayan perdido gran parte de sus ahorros en acciones invertidas en su propia entidad y que tengan que hacer ahora frente a los anticipos dados para tal efecto?", se preguntan los representantes de los trabajadores.

El comunicado recoge otras reflexiones de la reunión con el representante de RRHH de Santander que plasma el desconcierto y desilusión de la plantilla de Popular.

"Cómo puede ser que la alta dirección afirme que nuestro banco es solvente y en unos días vale 1 euro; cómo puede ser que se lleven indemnizaciones millonarias por hundir un banco, tanto los anteriores que hicieron una gestión nefasta, como los nuevos que no han sido capaces de reconducir la situación; cómo puede ser que sin acabar todavía un ERE en el que sobraban 2.590 trabajadores, nos compre un banco que acaba de realizar otro y nos quieran vender que los 11.000 trabajadores tenemos que ver con ilusión este nuevo proyecto", relatan.

Los sindicatos destacan su "preocupación" porque el responsable de RRHH de Santander "no se atrevió siquiera a dar un mensaje de tranquilidad a la plantilla, primero recuperar números, luego ya se verá…"

Señala que han pedido un "Protocolo de actuación para que los compañeros sepan que hacer ante esta situación crítica. UGT además solicito que este Protocolo tuviera un carácter preventivo para minimizar los riesgos que supone enfrentarse a estas situaciones de amenazas y crisis de ansiedad extremas".