La crisis de Popular ha provocado que muchos de sus clientes de banca privada hayan dejado la entidad. En el último año, la entidad, adquirida el 7 de junio por Santander, ha perdido el 30% del dinero que tenía en Sicav (sociedades de inversión que capital variable), vehículos que utilizan las grandes fortunas para canalizar su patrimonio.

Al cierre de 2016, Popular Gestión Privada, la gestora de la filial de banca privada de Popular -hoy controlada por Grupo Santander-, contaba con un patrimonio de 617 millones de euros. Al cierre de 2017, la cifra había caído hasta 431 millones. En este periodo, la entidad ha perdido una veintena de sociedades, reduciendo el número hasta 48, según datos de Inverco, la asociación de instituciones de inversión colectiva. El rescate exprés por parte de Europa y compra por parte de Santander no frenó la salida de dinero y, desde junio, 117 millones han volado de las Sicav del grupo.

Más allá del dinero que Popular Gestión Privada controlaba a través de Sicav, la filial de gestión de grandes patrimonios -que estuvo varias veces en venta- llegó a gestionar en 2006 más de 7.000 millones. De éstos, la mitad estaba invertido en fondos de inversión y un 20% en acciones. El resto se repartía entre pensiones, sicavs, depósitos, activos inmobiliarios y créditos.

La caída del negocio también ha afectado a las pensiones, gestionadas por Allianz Popular, firma participada por el banco y la aseguradora alemana. En diciembre de 2016, la entidad administraba 5.252 millones a través de estos productos. Doce meses más tarde, el importe retrocede un 10%, hasta 4.710 millones, pese a que el conjunto del sector registra incrementos.

El impacto negativo del colapso del banco y de las incertidumbre que rodearon a la entidad durante los meses previos a su intervención para evitar su colapso por falta de liquidez también se refleja en el volumen de sus fondos de inversión, pese a que este producto está en auge y la mayor parte de entidades españolas está creciendo en este negocio impulsando la comercialización de fondos. El saldo ha pasado en el último ejercicio de 11.159 millones de euros al término de 2016 a 9.377 millones un año después.

En total, la gestora de Popular Banca Privada y Allianz Popular -firma que gestiona los fondos y pensiones del grupo- administraban hace un año, en conjunto, 17.029 millones, frente a los 14.518 millones que gestiona actualmente. Ello, a pesar de que el volumen invertido en estos productos ha crecido en España, pasando de 501.058 millones en diciembre de 2016 a 574.962 millones, al cierre de 2017.

Acuerdo en riesgo

La alianza entre Banco Popular y Allianz se constituyó en marzo de 2011. Ambas entidades crearon una joint venture, que en ese momento se valoró en 1.058 millones de euros, para reforzar su alianza estratégica e integrar todas sus actividades en Vida, Pensiones y Fondos de Inversión en una misma plataforma. Es decir, integraron Eurovida (compañía de seguros de vida) y Europensiones (gestora de planes de pensiones) y Popular Gestión (gestora de fondos de inversión).

El acuerdo consistía en un acuerdo exclusivo de distribución de productos entre los clientes del banco con una vigencia de 15 años, hasta marzo de 2026.

La alianza está ahora en la cuerda floja. Santander tiene su propia gestora de fondos y pierde sentido que mantenga una acuerdo de distribución en sus oficinas de fondos gestionados por otra firma, controlada por Allianz. Lo mismo aplica a la distribución de seguros del grupo alemán.

Santander ya tenía una alianza con Aegon y el propio José Antonio Álvarez, consejero delegado de Santander, ha sugerido que prevalecería