Quien le iba a decir a Apple que convertirse en la primera cotizada del mundo en superar el billón de dólares de capitalización bursátil le iba a suponer un disgusto, un socavón. La compañía californiana rebasó esa marca el 2 de agosto y, en apenas unos meses, fulminó casi 450.000 millones de dólares, casi 400.000 millones de euros. Incluso tuvo que anunciar una rebaja en las previsiones de ingresos por primera vez en dos décadas.

El 2019, sin embargo, está siendo el de la recuperación de la que, ahora ya sí, es la compañía que más vale del mundo tras superar por poco a la incombustible Microsoft.

En lo que llevamos de año, los títulos de Apple en Wall Street se han disparado un 28%, con las últimas 10 sesiones en positivo. Tras empezar el 2019 rondando los 157 dólares por acción, ahora las participaciones en el fabricante del iPhone han hollado de nuevo la cota de los 200 dólares, disparando su valor hasta los 950.000 millones de dólares, casi 850.000 millones de euros.

Son buenas noticias para Apple, que está afrontando los momentos más importantes de su historia empresarial. Su modelo de negocio, apoyado en el otrora todopoderoso iPhone, está agotado y era necesario dar el giro que Tim Cook, su CEO, confirmó el pasado 25 de marzo con el anuncio de una batería de nuevos servicios.

Estas vías de ingresos son decisivas para reducir el peso de la facturación del iPhone en los balances. El teléfono inteligente era el responsable del 60% de todo el capital que llegaba a las arcas del gigante de Cupertino, un porcentaje que, como se ha demostrado ahora, era peligroso en caso de que el mercado perdiera apetito.

La buena marcha, en cualquier caso, no está exenta de riesgos. Los inversores todavía miran con cierta cautela a Apple, ya que las previsiones no acaban de ser especialmente esperanzadoras a la hora de sostener el crecimiento. Y más en un momento en el que parece que la caída en ventas del iPhone podría reducirse desde los 195 millones de unidades previstas para 2019 hasta el entorno de los 180 millones, tal y como apunta la analista de Taiwan Tech Anne Lee.

Según los expertos de Nomura, los datos de producción en China "seguirán a la baja" y destacan que eso puede "provocar un récord negativo de demanda en un mercado tan importante". La intención de Apple es paliar ese enfriamiento de las ventas en el gigante asiático con la conquista de India, pero no va a ser una tarea fácil a corto plazo por mucho que el plan esté ya en marcha.

Apuesta por los servicios

El giro en el modelo de negocio de Apple se materializó en su última Keynote, celebrada el pasado 25 de marzo en el auditorio Steve Jobs de Cupertino. Allí, Cook anunció la creación de un servicio de suscripción a medios de comunicación -News+-, una plataforma de contenidos en streaming -TV+- y hasta una tarjeta de crédito física en una alianza con Goldman Sachs.

Esta apuesta, que va a sacudir a mercados como el que domina con puño de hierro Netflix, tiene todavía que demostrar su valía. El mercado está, de momento, a la expectativa. El analista de Investing.com Haris Anwar ha querido enfriar el ánimo de los inversores y considera que el Apple TV+ no va a tener "un impacto inmediato a corto plazo que pueda cambiar las previsiones financieras de la empresa" señalando que "el mercado está cada vez más abarrotado" y que "no va a ser fácil desafiar el dominio de Netflix".

En Nomura se muestran "optimistas" con el futuro de los servicios como News+, pero le piden a Apple que haga más. "Sería muy positivo el lanzamiento de un producto como el iPhone SE2. Apple despachó más de 10 millones de unidades del SE en su momento", explican en un informe en el que apelan a la posibilidad de que un terminal barato llegara al mercado.

La entidad japonesa valora de forma positiva el rumbo de opciones menores como Apple Music o Apple Pay y confían en que sigan aumentando una importancia que, ahora mismo, es menor. "Tienen poco peso, sobre todo Apple Pay. Además, Apple Music tiene una buena base de suscriptores en el entorno de los 55 millones, pero su tasa de crecimiento está por debajo de Spotify", señalan.

El verdadero empujón en los servicios lo podría dar la App Store, el contenedor de aplicaciones del sistema operativo iOS con el que funcionan los más de 1.200 millones de dispositivos con la manzana en el reverso que hay en el mundo. Su potencial, debido a esta circunstancia, es enorme, pero Apple todavía tiene que encontrar la forma de exprimir todo lo que puede dar.

Según los analistas de Sensor Tower, el crecimiento de la tienda de apps se ha reducido desde el 18% de la facturación total hasta el 15% con el que cerrará el próximo trimestre, del que se conocerán los datos el 29 de abril. Esa cita será especialmente importante para Apple, que pondrá los números sobre la mesa y, quien sabe, en juego de nuevo la barrera del billón de dólares.