Nunca antes habíamos pasado tanto tiempo en casa. Y quizá por eso, nos ha dado tiempo a pensar en el tipo de hogar que queremos. Las terrazas, los balcones y los jardines han pasado a ser más buscados que nunca, cualquier conexión con el exterior se ha convertido en prioridad a la hora de elegir vivienda.

Estas preferencias se trasladarán al mercado inmobiliario cuando termine la crisis del coronavirus. Así lo creen los expertos. Jesús Rodríguez Estrada, consejero delegado de Instituto de Valoraciones explica que “se prevé un cambio en las prioridades de aquellos interesados en vivienda, destacando las terrazas y jardines privados, provocando así un repunte de las viviendas unifamiliares”.

Ignacio Ortiz, director de Investigación de Mercados en Activum, comentaba en una publicación en Idealista que este tipo de viviendas “es ahora un tesoro, máxime si cuentan con una parcela privativa”. Por ese motivo, Ortiz cree que “la preferencia por este tipo de casas aumentará, sobre todo en el corto plazo”.

Sin embargo, se trata de un tipo de vivienda poco común en el centro de las ciudades. Por eso, las preferencias de los compradores también ‘se mudarán’. “La periferia cogerá fuelle sobre el centro de las ciudades, por ofrecer viviendas con espacios más amplios y con espacios naturales y al aire libre próximas a ellas”, indica Jesús Rodríguez Estrada. Esta tendencia, del centro de la ciudad hacia la periferia, ya la confirma Idealista. Desde el portal inmobiliario explican que han notado un cambio en las zonas de búsqueda “que se están desplazando de las capitales a los municipios de la provincia”.

El consejero delegado y fundador de Housfy, Albert Bosch, no está tan convencido de que estos cambios tengan lugar. “Ahora mismo no está habiendo ventas, por lo que estamos hablando más de deseos que de realidades”, explica a este periódico. Pero sí que constata una tendencia: ante la incertidumbre del turismo, la gente está optando por alquilar una casa en la costa en lugar de pensar en viajes. “Cambian Tailandia por una casa en la Costa Brava con jardín o piscina”, describe.

Inversión en vivienda

Con todo, estos cambios en las preferencias inmobiliarias tendrán que esperar al próximo año. 2020 se espera complicado para el sector inmobiliario. Según el portal pisos.com están en riesgo unas 100.000 operaciones inmobiliarias por el coronavirus. Las previsiones del Banco de España también son negativas para este año. La entidad prevé que en 2020 la inversión en vivienda caiga entre un 6,9 y un 13%.

El ahorro de las familias es cada vez mayor y el sector prevé una caída del precio de la vivienda de entre el 6,5 y el 13,5%

Para 2021, las cosas pintan mejor. La entidad que preside Pablo Hernández de Cos prevé que la inversión inmobiliaria crezca entre un 3,8 y un 6,3%. Y es que pese a la situación del empleo y de la economía en general, las previsiones para España en el próximo año son de crecimiento.

Además, el ahorro de las familias es cada vez mayor y el sector prevé una caída del precio de la vivienda de entre el 6,5 y el 13,5%, una reducción que puede animar a los inversores una vez se recupere la actividad económica.

Volviendo al ahorro, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de ahorro de los hogares españoles alcanzó el pasado año el 7,4%, la más alta desde 2013. También se disparó la capacidad de financiación de los hogares, durante el pasado ejercicio y alcanzó los 14.000 millones de euros, frente a los 391 de 2018.

Con más dinero en el bolsillo y un crecimiento en la inversión en vivienda, los españoles optarán por casas unifamiliares en las afueras en las que pasar un eventual confinamiento sea más llevadero.