Imagen de un autocar de Auto Res.
Comisiones Obreras (CCOO) anunciaba este martes la convocatoria de una huelga en Auto Res para los días 24, 26 y 31 de diciembre y 2 de enero. El sindicato denuncia que la conocida compañía de autocares no ha recuperado muchos servicios que ofrecía antes de la pandemia. ¿Pero quién está detrás de los populares autobuses rojos y blancos que podrían dejar en tierra a decenas de pasajeros en plenas fiestas?
Auto Res pertenece al Grupo Avanza, un gigante del transporte de viajeros en España dirigido por Valentín Alonso que opera tanto en carreteras como en transporte público urbano con tranvías, metros, autobuses y bicicletas. La firma también se dedica a la gestión de terminales de autobuses y la gestión de empresas y servicios comerciales.
Sus orígenes se remontan al año 1885. Por aquel entonces nacía en Zaragoza uno de los primeros operadores de transporte privado de viajeros; Transportes Urbanos de Zaragoza. Por su parte, la compañía Auto Res veía la luz en 1943 y se convertiría a uno de los mayores operadores de transporte de largo recorrido en la Península Ibérica. Junto a la concesionaria del transporte urbano de Vigo (Vitrasa), nacida en los años sesenta, las tres formaron el Grupo Avanza en el año 2002.
En 2007, el grupo logró hacerse con la concesión para prestar el servicio urbano de Soria y adquirió la Corporación Española de Transporte (CTSA), el principal operador de servicios de Málaga. Un año después se sumó al grupo la sociedad Alosa y prosiguió su crecimiento obteniendo más concesiones de servicio interurbano de media distancia.
Desde 2009 ha ido renovando dichas concesiones y ha logrado sumar otras nuevas como la del Consorcio de Transportes de Madrid, vigente hasta el año 2024 y donde es el primer operador por encima de otras compañías. También cuenta con la gestión del transporte urbano de Covilhã (Portugal), con la del metro de Granada o con la de la línea de larga distancia Madrid-Segovia.
Pero lo que era un grupo puramente español fue absorbido en 2013 por el grupo mexicano Mobility ADO, una compañía también dedicada al negocio del transporte de pasajeros que cubre rutas entre más de 1.500 destinos por todo el país con una flota de más de 6.000 autobuses.
Tras ese proceso de absorción, Avanza tiene ahora mismo más de 7.000 empleados y una flota de 2.400 vehículos que recorren más de 180 millones de kilómetros al año con más de 300 millones de viajeros a bordo. Algunos de ellos temen ya quedarse en tierra ante los paros convocados por CCOO para reclamar, precisamente, que se retomen servicios que se ofrecían antes de la crisis sanitaria.
El conflicto en Auto Res
Según denuncia el sindicato, la firma está "utilizando la pandemia" como justificación para llevar a cabo "recortes de derechos laborales y aumentar sus beneficios a costa de las plantillas y de las usuarias y usuarios del servicio".
En este sentido, la organización sindical considera "innecesario" el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que mantiene activo la firma. Denuncia que varios pueblos de provincias como Orense, Vigo, Zamora, Salamanca, Cáceres, Badajoz, Cuenca o Valencia han visto reducidos o suprimidos los servicios de los que gozaban antes de la crisis sanitaria.
En este sentido, desde CCOO reclaman que el Gobierno tome cartas en el asunto, ya que el transporte de viajeros por carretera funciona mediante un modelo concesional. Por eso, piden al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana "que intervenga y obligue a la empresa a recuperar todos los servicios que se ofrecían antes de la Covid-19". Desde la compañía no han ofrecido respuesta a preguntas de El Independiente.
"El inexistente servicio que no presta Auto Res deja todos los días a un número indeterminado de personas sin el único medio de movilidad público del que disponían, afectando a numerosas poblaciones en toda la geografía del Estado", remarca el sindicato.
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