“Los socios del club tienen el derecho a conocer las actuaciones que llevaron al club a la ruina”, Así comenzó Joan Laporta, presidente del Fútbol Club Barcelona, la rueda de prensa en la que explicaba las razones por las que su junta directiva ha decidido judicializar la gestión económica de la anterior cúpula, liderada por Josep María Bartomeu.

La entidad deportiva catalana tiene, a fecha de 1 de febrero, una deuda de 1.173 millones de euros, unas pérdidas de 481 millones de euros y un coste salarial superior a un 40% al de otros clubes europeos de similar tamaño. Esta situación crítica empujó a Joan Laporta a pedir diversos informes a Deloitte y Kroll para tener una imagen fiel y real de las cuentas del Fútbol Club Barcelona. Con este panorama, la junta directiva se vio obligada a tomar medidas de urgencia y consiguió refinanciar la deuda a corto plazo con la banca acreedora, salvando la suspensión de pagos.

Con los muebles salvados, Joan Laporta y su equipo directivo iniciaron la investigación para conocer las razones por las que el Fútbol Club Barcelona atraviesa una posición tremendamente frágil en su área financiera. Así, la entidad señala que el trabajo realizado por Deloitte evidencia la existencia de operaciones de dudosa razonabilidad económica en concretas áreas de gasto que nos exigían profundizar en el análisis.

Joan Laporta también encargó una due dilligence (un estudio para conocer la realidad económica) a la consultora Kroll. En él, se extrae que la anterior junta directiva acometió, siempre supuestamente, contratos falsos, comisiones multimillonarias a futbolistas y representantes, pagos desproporcionados a las estrellas de la primera plantilla o abonos injustificados.

“Hay una serie de conductas delictivas gravísimas, que podemos calificar de esperpénticas y que no se sostienen desde ningún punto de vista. No se puede abusar ni regalar dinero como si fuese suyo. Existe un primer bloque de conductas consistente en la retribución de intermediarios. Las comisiones se sitúan cerca del 5% y se han detectado comisiones de hasta 33%”, explicaba Jaume Campaner, abogado del Barça. El experto jurídico señala que se llegaron a pagar hasta 10 millones de euros por comisiones en un solo fichaje, creándose “empresas para facturar solo del FCB”.

Además de estas comisiones, los documentos entregados por Kroll aseveran que la cúpula directiva llegó a pagar a varias personas para que no presentasen alegaciones para el plan del Espai Barça. Las pesquisas van mucho más allá e incluso la junta directiva actual que se efectuaron pagos a periodistas para que no criticasen la gestión deportiva y económica de Josep María Bartomeu. "Todo esto encaja en delitos de administración desleal y apropiación indebida. No hace falta que se hayan llevado dinero. También encajan contra quienes distraen dinero a favor de terceros y en contra del patrimonio", sostuvo Campaner.

Sospechas del fichaje de Griezmann

La junta actual alega que existe otra irregularidad en uno de los fichajes de relumbrón que hizo Josep Bartomeu. Ese es el de Antoinne Griezmann. La consultora señala que se realizó una simulación de un contrato de 15 millones de euros con el Atlético de Madrid a cambio de tener derechos de tanteo hacia algunos de sus jugadores y de que no presentara alegaciones en un expediente abierto por la Real Federación Española de Fútbol. "La simulación es la base del contrato. Se pone un concepto para vincular unos pagos y la razón real es la no aportación de pruebas contra el club en una investigación de la RFEF", agregó el letrado del Barça.

Con todo, el Barcelona cifra en 30 millones de euros el perjuicio global de la consultoría acometida por Kroll tras contabilizar las mordidas que daba a ciertas personas, periodistas y comisiones a agentes. 

La investigación llevada a cabo, una vez que Joan Laporta fue elegido presidente del Barcelona, arroja que se acometieron operaciones que no pasaron por el control de la junta ni de la asamblea general. La junta actual incide, en este sentido, en los altos salarios de los futbolistas y de los contratos deportivos que firmaron en los últimos años. 

Respecto a la radiografía actual que vive el club en el área financiera, Eduard Romeu, vicepresidente económico, señala que la entidad azulgrana ha logrado ahorros por valor de 159 millones de euros en concepto de ahorro de fichas, además de 27 millones en las condiciones de financiación y 25 en gastos ordinarios. 

Además, el Fútbol Club Barcelona está buscando un nuevo sponsor principal que le permita aumentar sus ingresos y reducir la deuda que le vence a corto plazo. En las últimas semanas han sido muchos los nombres que han sonado con fuerza para que luzca en la zamarra azulgrana si bien, la junta directiva aseguró que “la decisión se demorará” durante varias fechas más para evaluar cuál de los candidatos es el idóneo.

Sin señalar a Bartomeu

La denuncia formalizada frente a la Fiscalía no se dirige contra personas concretas por lo que será la propia Justicia, que ha dado validez a la documentación y ya investiga lo ocurrido en las arcas del Barça, la que decida quién deberá tener responsabilidades.

El Club ha quedado a disposición de la Fiscalía Provincial de Barcelona y de los cuerpos policiales que puedan auxiliarla para facilitar las aclaraciones y elementos de prueba que necesiten para una investigación más eficaz de los hechos.

“Quien determinará los culpables será la Fiscalía. Nosotros queremos esclarecer los hechos. El socio tiene derecho a conocer la realidad económica. No estamos señalando a nadie. La Fiscalía tiene todos los miedos para investigar estos hechos. Nuestra obligación es poner en conocimiento de los socios estas actuaciones”, dijo Joan Laporta en la presentación de la documentación recabada por las consultoras.