La inclusión financiera es uno de los quebraderos de cabeza del sector bancario. Por ello, las tres asociaciones más importantes de la banca española: la Asociación Española de Banca (AEB), la Confederación de Cajas de Ahorro (CECA) y la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC) han encargado un informe para tomar una fotografía de la situación actual. Joaquín Maudos, catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Valencia y director adjunto del Instituto Valenciano de Investigación Económica (Ivie), ha presentado los principales resultados y la conclusión es que 657.557 personas en España no tienen acceso a ningún servicio bancario.

Esta cifra que supone el 1,4% de la población total no tiene ni oficina bancaria, ni cajero, ni agente social, ni acuerdo con correos a menos de cinco kilómetros. Esta población vive en 3.230 municipios sin ese acceso al efectivo. El 92,4% de esos municipios tienen menos de 500 habitantes y un total de 243 tienen 500 habitantes que suman 211.550 personas y solo 57 municipios con más de 1.000 habitantes.

Es en estos dos últimos ámbitos donde, según la opinión de Maudos, se debe centrar la banca toda su atención para evitar la exclusión financiera. Estos municipios se sitúan, en su mayoría, en la provincia de León, Cantabria, Navarra y Girona.

Maudos ha explicado que estas más de 3.000 localidades, concentradas en su mayoría en la España "vaciada y rural", no tendrían acceso ni a sucursales, ni a cajeros automáticos, ni a agentes financieros ni a oficinas móviles, entre otros. Además, esta cifra solo tiene en cuenta oficinas y cajeros de la banca, sin contabilizar las redes de otras empresas privadas.

Preguntado por el estudio que ha publicado este martes la Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia sobre la retirada de efectivo en cajeros automáticos, Maudos ha afirmado que el problema de la exclusión financiera "es complejo" y requiere "una combinación de medidas", aplicándolas asimismo según la situación de cada zona o municipio.

En concreto, ha asegurado que instalar un cajero automático en un municipio de 50 habitantes "es ineficiente e ineficaz" ya que la población puede tener más de 65 años y no estar ya familiarizados o no querer utilizar esa tecnología. "En cambio, quizá en un pueblo grande sí se pueda poner", ha ejemplificado. Así, ha valorado de forma positiva la propuesta de la CNMC de utilizar los comercios para la retirada de efectivo, si bien ha insistido en la importancia de hacer "medidas a la carta".

El problema de la exclusión financiera "es complejo" y requiere "una combinación de medidas"

Durante la presentación, la directora general de la AEB, María Abascal, ha explicado que el objetivo del informe es contar con una "foto" sobre la accesibilidad a los servicios en toda España y, con especial atención a las zonas rurales.

Plan de actuación del sector

Además, ha indicado que el sector bancario está trabajando con el Gobierno en un plan con medidas para reforzar la inclusión financiera que se presentará una vez esté finalizado.

Por su parte, el director corporativo de Servicios Asociativos y Recursos de CECA, Antonio Romero, ha afirmado que se trata de un estudio con una "granularidad extraordinaria", a nivel municipal, que permite analizar "todas las dimensiones del problema" y "extraer conclusiones". Ha llamado a utilizar el informe para "adoptar soluciones a continuación" y "empezar a pensar en esas medidas que contribuyan a seguir combatiendo la exclusión financiera" en España.

La secretaria general de Unacc, Cristina Freijanes, ha incidido en su intervención en la importancia de la educación financiera, incluyendo el plan impulsado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Banco de España y el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, así como las iniciativas llevadas a cabo por las propias entidades bancarias y las patronales para asegurar la inclusión a través de la promoción del conocimiento financiero.