España vuelve a tirar de carbón. En plena emergencia por la dependencia del gas para generar electricidad, nuestro sistema ha tenido que recurrir una vez más a una de las materias primas que más contaminan.
A pesar de que Endesa, tal y como avanzó este periódico, dejó de quemar carbón en As Pontes antes del verano, la falta de otras tecnologías en el mix eléctrico ha provocado que durante agosto y este inicio de septiembre se haya utilizado un 300% más de dicho mineral que durante el mismo período del año anterior. En la actualidad, esta central es la única que podría sumarse a la contribución del carbón al pool, junto a las centrales todavía operativas de la eléctrica portuguesa EDP en Los Barrios (Cádiz) y en Aboño (Gijón).
En concreto, y según los datos de Redeia (antigua Red Eléctrica), España requirió 961 Gwh durante agosto y la primera semana de septiembre. Estas cifras quedan muy lejos de los poco más de 428 Gwh que se generaron en el mismo período del año anterior.
El carbón, que estaba destinado a casi desaparecer del mix energético español, ha recobrado importancia y tiene un peso del 3,2% del total. Esto es apenas un 1% menos que la energía hidráulica, que siempre ha obtenido un peso relativamente importante en años anteriores. La sequía que asola España, que es la más importante desde 1995, ha empujado a las generadoras a tirar de dicha materia prima.
Y la producción podría ir a más. El Ejecutivo tiene que decidir en las próximas fechas si se reabre la producción de As Pontes, una de las plantas más importantes de carbón para nuestro mix energético. No obstante, la voluntad de Endesa es no tener que recurrir al mineral y fuentes de la compañía recalcan que “cuanto más rápido sustituyamos combustibles fósiles contaminantes y que generan dependencia del exterior por energías limpias autóctonas, antes nos aislaremos de tensiones geopolíticas”.
Cabe destacar,que la empresa propietaria de la planta, Endesa, lleva desde 2019 tramitando el cierre de la térmica, pero ante el cambio del escenario energético el Ejecutivo de Sánchez ha encargado un informe a Red Eléctrica para que analice si es necesario mantener la central de carbón operativa para garantizar que no haya problemas de suministro.
De hecho, la ministra de Transición Energética ha admitido que durante los meses de verano, el sistema eléctrico español está registrando más entradas de las centrales de fuel y carbón. En este sentido, y en una entrevista concedida a Expansión, Teresa Ribera propone “ampliar” durante un tiempo el mercado de derechos de emisión. Esto se debe a que, como consecuencia de la sequía y de la falta de gas en muchos países, dichos poderes han disparado su precio, lo que se traduce en un nuevo encarecimiento a la hora de generar energía.
33% del gas
Agosto, que se caracterizó por las altas temperaturas y en el que se constató la ola de calor más prolongada de nuestra historia, provocó que el mix energético fuera tremendamente dependiente de las energías no renovables frente a las renovables. Además de la pobre aportación de la hidráulica (4,2%), la eólica apenas representó el 16% mientras que la fotovoltaica se quedó en un 12,5%.
En contra de lo que se pueda pensar, un período de mucho calor y sol no ayuda a las tecnologías renovables ya que pierden eficiencia cuando se sobrepasan ciertos umbrales. Las placas solares, para producir energía necesitan radiación solar de calidad, y con las altas temperaturas esto no sucede. En la temporada de primavera, por ejemplo, las placas solares funcionan de forma más eficiente que en verano, ya que hay una radiación solar de buena calidad y la temperatura es más suave.
Con todo, el gas ha sido el pilar en el que se ha sustentado el sistema eléctrico español para poder producir energía. En concreto, de acuerdo a los datos de Redeia, el 33% de la demanda se ha generado a través de esta materia prima. El 13 de agosto, por ejemplo, se marcaron cifras récord durante el verano. En concreto, las centrales de gas fueron capaces de generar 339 Gwh al sistema eléctrico, de los 844 Gwh que demandaba el propio sistema. Es decir, que casi el 40% de la electricidad utilizada por los españoles provenía de las instalaciones de ciclo combinado.
La AIE pide a Europa no cerrar las centrales
Cabe recordar que hace pocos meses la máxima autoridad energética, Agencia Internacional de Energía, pidió a los principales países europeos que mantuviera abiertas las centrales de carbón y pospusiera los planes de clausura de las plantas debido a la amenaza de Putin de cerrar el grifo con el petróleo y con el gas.
“Cuanto más nos acerquemos al invierno, más entendemos las intenciones de Rusia. Europa debería estar lista en caso de que el gas ruso se corte por completo”, dijo recientemente el director de la agencia, Fatih Birol.
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