Endesa no volverá a comprar más carbón para la central térmica de As Pontes. Así lo confirman fuentes de la compañía a este periódico. La eléctrica aún tiene stock de la última partida que llegó hace semanas a los almacenes de la planta gallega, pero una vez se agote, la maquinaria volverá a entrar en fase de desconexión.

A pesar de que Endesa produjo electricidad casi un 17% más en el primer trimestre del año a través del carbón, según consta en su memoria trimestral de resultados, la compañía continúa marcando sus objetivos de clausura de todas y cada una de las plantas que se propulsan a través de este material, uno de los más contaminantes para la atmósfera.

Las mismas fuentes revelan que, en principio, solo tienen carbón para 15 días por lo que Endesa dejará de generar electricidad a través de esta tecnología en dos semanas. A su vez, la intención que tiene Endesa es la de no volver a activarla, tal y como sí ha sucedido durante los últimos trimestres ante la crisis energética.

Por ejemplo, el pasado octubre Endesa decidió comprar casi 225.000 toneladas de carbón y su entrada a la planta llegó entre el 20 de marzo y el 28 de marzo. Antes, en noviembre, la planta se volvió a activar tras estar cinco meses apagada, pero los precios históricos del pool hizo que la compañía apretara el botón de encendido. Eso sí, durante todo este tiempo, solo ha estado en activo uno de los cuatro grupos generadores con los que cuenta As Pontes.

Endesa tiene previsto desmantelar todas las plantas de carbón para 2027. Estas fechas supondrán recortar en tres años los planes de la compañía. Actualmente, las centrales de Andorra (Teruel), Compostilla (León), y Carboneras (Almería) están en proceso de desmantelamiento, mientras que la compañía también ha solicitado el cierre de la central de As Pontes (A Coruña), cuya resolución se espera obtener este año, y está tramitando el cierre de la central de Es Murterar (Alcudia) en Baleares. Todas estas infraestructuras cuentan con planes Futur-e adaptados en función de las características de cada entorno.

Cabe recordar que la compañía solicitó en 2019 el cierre de forma oficial ante el Ministerio de Transición Ecológica el cierre de la central. No obstante, la tramitación aún no está acabada y es por ello que la instalación aún está disponible y a requerimiento del gestor del sistema (Red Eléctrica).

Fuentes de la compañía señalan que “esta espera no es la idónea para la zona, ya que cuanto antes culmine la tramitación, antes se vislumbrará el futuro de As Pontes y Galicia". Además, “contrasta con la situación de las demás áreas en descarbonización de Endesa en el resto de la España peninsular y Portugal, que avanzan muy positivamente en la transición, poniendo el foco en el empleo y en los proyectos de futuro en esos emplazamientos, contando todas ellas con el cierre autorizado”, remarcan.

Más carbón

El incremento de la quema de carbón por parte de Endesa coincide con el mayor uso de este material para generar electricidad en España. Nuestro sistema ya ha quemado más de 3.500 Gwh durante mayo, frente a los 1.517 Gwh que se generaron con dicha tecnología a cierre del quinto mes de 2021. Es decir, que a falta de cerrar el presente mayo se ha utilizado casi tres veces más de esta materia prima que el año anterior.

El uso desmesurado del carbón coincide, además, en plena revisión estratégica europea ya que la Comisión Europea, ante la emergencia energética, se ha visto obligada a tener que utilizar términos que parecían desterrados. En concreto la UE aboga por seguir utilizando las centrales térmicas o nucleares para sustituir el gas de Rusia.

Por su parte, España tiene el compromiso de no crear electricidad a base de carbón antes de 2030 tras su ingreso en la Powering Past Coal Alliance (PPCA). Dicha asociación es una coalición de gobiernos, empresas y organizaciones nacionales y subnacionales que trabajan para avanzar en la transición de la generación de energía a base de carbón a una energía limpia.