En noviembre de 2021, los sindicatos UGT y CCOO y el Gobierno acordaron subir las cotizaciones sociales desde este año para sostener las pensiones. Es lo que se bautizó como el mecanismo de equidad intergeneracional (MEI, por sus siglas), un nuevo sistema que sustituyó al factor de sostenibilidad que aprobó Mariano Rajoy en 2013 y que busca preparar al sistema para la jubilación de la generación del baby boom, la más numerosa de la historia de España.

La principal diferencia entre uno y otro es que el primero, el que acaba de entrar en vigor este mes, aumentará los ingresos de la Seguridad Social a través de una subida temporal de las cotizaciones sociales que mes a mes aportan tanto empleados como empresas, mientras que el segundo reduciría las pensiones futuras. Estaba previsto que el de Rajoy recortase las pensiones hasta 300 euros al mes, en el caso de los más jóvenes, como bien desglosó este artículo de eldiario.es.

Con el cambio, ahora -y en principio hasta 2032- los trabajadores deberán aportar más en concepto de cotizaciones por contingencias comunes, en concreto, 0,1 puntos porcentuales más que su aportación actual -el 4,7% de su base de cotización-. La empresa, de su lado, abonará 5 veces más como parte de este "extra": 0,5 puntos porcentuales más de lo que lo hacía hasta ahora -el 23,6% de la base de cotización del trabajador-. Esas cotizaciones adicionales deberán abonarse, por ahora, durante los próximos diez años, creando un colchón de ingresos para afrontar las nuevas jubilaciones.

¿Cómo se traduce eso en las nóminas de los asalariados españoles? ¿Van a ganar menos este año a causa de este cambio legislativo? ¿Cuánto? Y, ¿de qué manera afectará a las empresas? ¿Podrán repercutir el aumento de las cotizaciones en los salarios de sus empleados? Estas son algunas de las dudas que pueden plantearse ante la entrada en vigor del MEI, a las que tratará de responder este artículo.

2 euros menos al mes para el sueldo medio

Según cálculos realizados por este medio, la subida de las cotizaciones por contingencias comunes (en la tabla, CC) llevará a que el trabajador medio español -con un sueldo de 2.000 euros brutos mensuales, aproximadamente, según los últimos datos disponibles del Instituto Nacional de Estadística, de 2021- reciba unos 2 euros menos de salario neto al mes durante los próximos diez años.

Cotización CC 2022Cotización CC 2023Diferencia para 2.000€/mes
Trabajador4,7% de la base de cotización4,8%2€ (94-96)
Empresa23,6% de la base de cotización24,1%10€ (472-482)
Elaboración propia a partir de datos de Seguridad Social

Esta será su aportación "extraordinaria y temporal", como la califican en el Ministerio de Seguridad Social, donde recuerdan que el reparto empresa-trabajador que se ha escogido es el mismo que el actual de las cotizaciones sociales. Asimismo, indican que la recaudación se destinará a la reactivación del Fondo de Reserva -la "hucha de las pensiones"- que recibirá por ello este año cerca de 3.000 millones.

Así, un trabajador medio cobrará este año 24 euros menos por esta subida de las cotizaciones sociales, como se refleja en la tabla superior. Si hasta ahora a ese empleado le correspondía aportar a la Seguridad Social 94 euros al mes de su sueldo, el 4,7% que deben abonar por contingencias comunes todos los trabajadores del régimen general, ahora esa cantidad ascenderá a los 96 euros mensuales.

El aumento será más costoso para las empresas

Se trata de un aumento del coste que será más significativo para las empresas que emplean a estos trabajadores. Hasta ahora, estas debían abonar un 23,6% de la base de cotización de cada trabajador en concepto de contingencias comunes. Desde este 1 de enero, ese porcentaje asciende hasta el 24,1%. Por tanto, y siguiendo el mismo ejemplo anterior, para un salario bruto de 2.000 euros mensuales con alta en el régimen general, la empresa pasará de pagar 472 euros a abonar 482 euros al mes, 10 euros más.

Este cambio no afectará a la nómina del empleado, sino a las cuentas de la empresa. Lo que la compañía sí podría decidir hacer es repercutir ese incremento de los costes en sus nuevos gastos, en futuras subidas salariales o contrataciones, pero fuentes consultadas por este medio apuntan que no podría descontarlo de las nóminas. Por este motivo, cuando el Gobierno trató de negociar la medida con los sindicatos y organizaciones de empresarios más representativas, estas últimas rechazaron firmar el aumento de las cotizaciones que se decidió implementar para sostener las pensiones.

Pero esta medida no será suficiente para afrontar la jubilación de la generación más numerosa. Por eso, el Gobierno ha prometido a Bruselas aumentar el periodo que se utiliza para calcular la pensión, así como incrementar las bases máximas de cotización, esto es, las cotizaciones que aportan los sueldos más altos, que a día de hoy están limitadas alrededor de los 4.000 euros. A día de hoy el acuerdo en el diálogo social parece imposible en ambos aspectos, pero desde el Ministerio aseguran que continúan trabajando en ello y para cumplir cuanto antes con los plazos acordados con Bruselas, que terminó el 31 de diciembre.