Las entidades financieras han modificado la oferta hipotecaria en el último año. La subida vertiginosa del euríbor provocada por la política monetaria más restrictiva ya se está notando en la concesión de crédito. El acceso está más restringido sobre todo por el alto precio de los préstamos hipotecarios. Sin embargo, a pesar de que parece que se está terminando la era de las hipotecas baratas y que el euríbor está cerca del 4%, estos productos son, de media, un 89% más baratas que en la crisis financiera.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el interés medio de las hipotecas sobre viviendas se situó en febrero de este año en el 2,86%, su nivel más alto desde mayo de 2017. Sin embargo, durante la crisis financiera los intereses medios llegaron a rozar incluso el 6%. En enero de 2009, primer dato disponible en los datos históricos del INE,el interés medio fue del 5,40%, casi el doble que en la actualidad.

Desde ese pico, el interés medio se ha ido reduciendo. En ese momento, el euríbor estaba en el 2,62%, pero el país ya estaba inmerso en una crisis inmobiliaria y bancaria, que revolucionó el sistema financiero español. De hecho, desde esa fecha, el interés se fue reduciendo y comenzó a cambiar el mercado hipotecario, ya que la crisis económica, el alto desempleo y la inestabilidad del sector inmobiliario tuvieron un colapso.

El interés medio de las hipotecas nuevas tocó un mínimo en abril de 2022, justo el mes en el que el euríbor volvió a terreno positivo, en el 1,76%. Desde ese momento, el interés medio ha aumentado un 62,5%. Pero es que el índice al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas variables en España ha subido desde abril de 2022 del 0,013% al 3,647% del cierre de marzo. Aunque parezca que estas decisiones solo afectan a las hipotecas variables, también encarecen las fijas, ya que las entidades suben su precio porque los clientes demandan más ese producto en tiempo de subida de tipos por la estabilidad de pagar siempre la misma cuota.

La oferta hipotecaria que ofrecen los bancos muestran que este interés medio seguirá aumentando en los próximos meses. De hecho, muchos expertos situaban el euríbor en el 4% antes del cierre del primer trimestre del año, pero la crisis bancaria de los cuatro bancos medianos de EEUU y el colapso de Credit Suisse frenó la subida de este índice. Pero la rápida actuación y resolución de esta crisis ha hecho que se acerque a ese porcentaje. El euríbor diario ya ha tocado el 3,9%.

Además, todo apunta a que el Banco Central Europeo continuará con las subidas de tipos en las próximas reuniones. La próxima decisión se tomará el 4 de mayo y el mercado espera una subida del 0,25%, porque la inflación aún está alta, aunque siempre puede haber un cambio de rumbo, ya que los miembros del consejo insisten en que irán reunión a reunión según los datos disponibles. Esta nueva subida volverá a encarecer el préstamo hipotecario.

La directora de Estrategia de JP Morgan Asset Management para España y Portugal, Lucía Gutiérrez-Mellado, espera que el BCE aumente más los tipos que la Reserva Federal, estima que todavía se producirá una subida de 50 puntos básicos, sin precisar si en una o dos reuniones. Lo que sí que ha querido dejar claro es que aunque llegue el fin de la subida de tipos, los bancos centrales se mantendrán con los tipos altos para seguir restringiendo el crédito y frenar la inflación.

Y parece que este nuevo ciclo de política monetaria ya está haciendo su efecto, porque las hipotecas se están reduciendo. Los últimos datos del INE muestran que el número de hipotecas constituidas sobre viviendas bajó un 2% el pasado mes de febrero respecto al mismo mes de 2022, hasta sumar 35.900 préstamos. Con el descenso interanual de febrero, la firma de hipotecas sobre viviendas retorna a tasas negativas después de que en enero subiera un 2,9% interanual. Antes de eso, en diciembre de 2022, este indicador registró un descenso interanual del 8,8% tras 21 meses de ascensos interanuales consecutivos.

Los expertos de Bankinter explican que el euríbor 12 meses se mantendrá en el entorno del 3,9% hasta final de año. Esto se traduce en un incremento superior a los 450 euros al mes para un nuevo crédito hipotecario (145.000 euros de media en España). Ante esto advierten de que la tasa de esfuerzo se elevará hasta niveles próximos al 40%, por encima de la media histórica del 35%, como consecuencia del incremento del euríbor y de las cuotas hipotecarias. Al mismo tiempo que eso ocurre, la inflación "supera con creces el incremento de los salarios", con la consiguiente merma del poder adquisitivo y la tasa de ahorro de los hogares.