Esta semana, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del martes, el Gobierno explicó el proyecto de ley para la protección de los menores en el entorno digital. Una norma que aprobaron ese día en segunda vuelta, y que por tanto ha pasado ya a tramitación parlamentaria.

Fue Félix Bolaños, Ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, el encargado de dar los detalles sobre el proyecto, que según dijo responde a "la preocupación de las familias y de los padres españoles en relación con los entornos digitales y los riesgos que ello supone para los menores de edad".

La norma recoge una serie de derechos para que los menores estén protegidos en Internet, pero también contiene una serie de "obligaciones y regulaciones". Entre otras cosas, obliga a los fabricantes de móviles a implementar sistemas de control parental realmente "efectivos", crea órdenes de alejamiento digital y tipifica que los deepfakes -los contenidos editados o generados con IA- que tengan contenido sexual o gravemente vejatorio serán a partir de ahora delitos contra la integridad moral.

En paralelo, también modifica diversas leyes para permitir cosas como que la edad de consentimiento de los menores para acceder a cualquier red social se eleve de los 14 a los 16 años. "Es una ley que es pionera. Vamos por delante en Europa, una vez más, regulando este tipo de situaciones. El resultado es ambicioso y puede dar, desde luego, solución a un problema social que existe en este momento, que es el acceso indiscriminado de menores sin ningún tipo de control a redes sociales o al entorno digital", declaró Bolaños al respecto.

La preocupación por este tema no es nueva. Y las iniciativas para tratar de solventarlo por parte de las administraciones públicas, tampoco. En los últimos años, sin ir más lejos, el Gobierno ha lanzado distintos proyectos para atajar un problema que, a día de hoy, sigue pareciendo incontrolable. Uno de los más conocidos ha sido la Cartera Digital Beta, una aplicación móvil que pronto se ganó el sobrenombre de 'pajaporte'.

El proyecto fue presentado el 1 de julio de 2024 por José Luis Escrivá, por entonces ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, actualmente gobernador del Banco de España. En resumen, se trata de un sistema que verifica que los usuarios son mayores de edad antes de acceder a los contenidos para adultos en Internet. Desde el principio, la idea generó algunas dudas sobre su viabilidad a nivel técnico y sus posibles riesgos. Pero, según Escrivá, sería un sistema muy "fácil", que estaría disponible para los ciudadanos "al final de verano".

Meses después, la aplicación todavía no está operativa. Consultados por El Independiente, desde el Ministerio detallan que "está en proceso de obtener la certificación en el Esquema Nacional de Seguridad y posteriormente se procederá a la certificación LINCE del Centro Criptológico Nacional, con el fin de que cumpla con los requisitos de seguridad necesarios en cuanto a protección de los datos". Por ello, aseguran que no pueden dar "plazos" del tiempo estimado que tardará en estar en funcionamiento, al "depender de terceros esas certificaciones". Tampoco aclaran con qué inversión ha contado la iniciativa.

Lo que sí clarificaron es que las herramientas de verificación de edad son sólo "una parte del plan integral que va a desplegar el Gobierno" para la protección de los menores en entornos digitales. Y reiteraron que "España ha sido pionera planteando una herramienta de verificación de edad que proteja de contenidos inapropiados en Internet, como el porno".

"El desarrollo de esta herramienta se anticipa a la obligación europea de contar con mecanismos digitales de identificación seguros y efectivos, que entrará en efecto en 2026. De hecho, y siguiendo el camino abierto por España, la Comisión Europea ha lanzado una iniciativa para desarrollar una herramienta interoperable entre los estados miembros y España está a disposición de la Comisión para compartir su experiencia con el resto de socios comunitarios", expusieron.

La colaboración de las webs porno

Mucho antes de la presentación de la app, en enero de 2024, Pilar Alegría, ministra de Educación y portavoz del Gobierno, informó de que el Gobierno esperaba contar con la colaboración "voluntaria" de las webs porno y de las empresas tecnológicas para implementar esta medida. Estaba por ver si éstas accedían, aún sabiendo que perderían usuarios si el proyecto salía adelante. Pero en esas fechas el Ejecutivo mantuvo reuniones con algunas de ellas para tratar de convencerlas.

Por aquel entonces, este periódico se puso en contacto con las principales páginas de contenidos para adultos a nivel español y mundial para tantear su postura sobre este tema, preguntándoles si estarían dispuestos a colaborar. No contestó ninguna salvo Pornhub, una de las más famosas y visitadas a nivel mundial, que lo hizo a través de su empresa matriz, Aylo, que también está detrás de plataformas como YouPorn, Brazzers, Men.com, Mofos, Reality Kings o RedTube.

Desde Aylo afirmaron que llevan años "apoyando públicamente la verificación de la edad de los usuarios. Pero deslizaron que, "por desgracia, la forma en que muchas jurisdicciones de todo el mundo han optado por aplicar la verificación de la edad es ineficaz, irregular y peligrosa".

Así, consideraban que cualquier normativa que "obligue a cientos de miles de sitios para adultos a recopilar cantidades significativas de información personal altamente sensible" está poniendo en peligro la "seguridad de los usuarios". Y señalaron que, "como ha demostrado la experiencia", a menos que se aplique correctamente, los usuarios simplemente accederán a sitios que no cumplan la normativa o encontrarán otros métodos para eludir estas leyes.

"No se trata de especulaciones. Hemos visto cómo se desarrolla este escenario en Estados Unidos. En Luisiana, el pasado enero, Pornhub fue uno de los pocos sitios que cumplió la nueva ley. Desde entonces, nuestro tráfico allí cayó aproximadamente un 80%. Estas personas no dejaron de buscar porno. Simplemente emigraron a rincones más oscuros de Internet que no piden a los usuarios que verifiquen su edad, que no cumplen la ley, que no se toman en serio la seguridad de los usuarios y que a menudo ni siquiera moderan los contenidos. En la práctica, las leyes sólo han hecho que Internet sea más peligrosa para adultos y niños", aseveraron.

Para Aylo, la única solución que hace que Internet sea más seguro, preserva la intimidad del usuario e impide que los niños accedan a contenidos para adultos es realizar la verificación de la edad en la fuente. Es decir, en el propio dispositivo, sea un móvil, un ordenador o cualquier otro . Y aseguran que la tecnología para lograrlo "existe" ya hoy en día. En ese sentido, parecían bastante alineados con la propuesta del Gobierno, y afirmaron estar "ansiosos" por colaborar con el Ejecutivo español y "llegar a una solución eficaz". "Siempre cumpliremos la ley, pero esperamos que los gobiernos de todo el mundo apliquen leyes que protejan realmente la seguridad de los usuarios", zanjaron.

Las negociaciones con la industria pornográfica para acercas posturas prometen ser un reto en los próximos años. Sin embargo, tal y cómo informó El País hace unas semanas, ya hay una página porno española que ha implementado un mecanismo parecido a la Cartera Digital Beta. Se trata de Cumlouder, gestionada por la empresa asturiana Techpump, que pide a sus usuarios en Barcelona y Madrid que escojan entre dos sistemas de verificación de edad diferentes para acceder a sus contenidos.

La primera opción es introducir el DNI, algo similar a lo que propone la app del Gobierno. Y la segunda es una herramienta que estima la edad del usuario a través de la IA. El resultado es que el tráfico de la web ha caído un 85% , y el 15% restante que consigue ver los contenidos lo hace mayormente a través de la IA (11,7%), y no mediante la solución similar al 'pajaporte'. "Ese 85% es caída de negocio, porque el tráfico es negocio. Y la gente que se marcha acaba en un Xvídeos o en un Pornhub de turno. Si llegamos a hacerlo para toda España, bajamos persiana", valoraban desde la empresa.

El acceso de los menores españoles al porno

Esta semana Bolaños recordó que la edad media en España para que los menores tengan móvil es de 11 años, exactamente la misma en la que tienen por primera vez acceso a algún contenido pornográfico. Según el ministro, en casi la mitad de esos casos acceden a él de manera casual, navegando por Internet o por redes sociales. "Esto supone que estamos ante un caso de preocupación de las familias que, desde el Gobierno, tenemos que abordar y tenemos que regular", expresó.

En esa línea, destacó que en el Eurobarómetro de julio del 2023, el 92 % de las familias indicaban que tenían una alta preocupación por los contenidos a los que accedían sus hijos en Internet. Y también que una encuesta del CIS a nivel nacional de febrero del 2024 recogía que el 94 % de los ciudadanos en nuestro país están a favor de restringir o limitar el acceso a Internet de los menores de edad.