Si tienes dinero en una cuenta corriente debes saber que Hacienda puede quedárselo. La legislación española contempla que la Hacienda Pública reclame los fondos de cuentas bancarias que hayan permanecido inactivas durante un largo periodo de tiempo. Debes saber cuál es el funcionamiento de este proceso es fundamental para proteger su patrimonio y evitar sorpresas que puedan influir en su estabilidad financiera.

¿Por qué Hacienda puede quedarse con tu dinero?

La cuestión clave se encuentra en la Ley 33/2003, de 3 de noviembre, del Patrimonio de las Administraciones Públicas; esta ley contiene en su artículo 18 la determinación de que se consideran "saldos y depósitos abandonados" el dinero de cuentas corrientes, entre otros productos financieros, por no registrar actividad de forma ininterrumpida durante 20 años. En ningún caso se trata de un establecimiento de una multa o sanción de Hacienda: debemos estar ante un procedimiento legal por el que se pretende gestionar fondos declarados abandonados.

Qué se entiende por inactividad en una cuenta bancaria

No es suficiente con que tu cuenta te produzca intereses o que recibas extractos de forma automática. Para la ley, cualquier acción voluntaria realizada por el titular es considerada actividad, ya sea hacer un ingreso o un reintegro efectivo, emitir una orden de transferencia, modificar, actualizar tus datos personales o bien contratar un producto relacionado con el banco. Si durante 20 años no haces nada de eso, tu cuenta bancaria será considerada oficialmente abandonada, es decir, pasaría al Estado el derecho de reclamarla.

Hacienda y el proceso para apropiarse de las cuentas inactivas

Cómo identifican los bancos las cuentas abandonadas

Las entidades bancarias tienen la obligación de revisar periódicamente sus productos y detectar las cuentas inactivas que llevan 20 años sin actividad ni contacto. Una vez que se determina que una cuenta está inactiva la información debe ser comunicada al Ministerio de Hacienda y reflejada en sus informes de auditoría. Todo este proceso garantiza que el Estado pueda actuar según lo previsto en la ley y que los fondos inactivos se encuentren debidamente gestionados.

Qué ocurre con el dinero transferido al Estado

De la misma manera, las autoridades del Ministerio de Hacienda al verificar el hecho de que una cuenta se encuentra sin ningún tipo de actividad, el dinero correspondiente se transfiere automáticamente hacia las cuentas de la Administración General del Estado, pero no lo hará dentro de la partida de los gastos generales. Así lo manifiesta expresamente la Ley, la cual indica que se utilice el dinero que permanece en los fondos de tal concepto para sufragar programas educativos relacionados con personas con discapacidad, así como los proyectos de accesibilidad universal. La Dirección General del Patrimonio del Estado es la responsable en la gestión de este dinero y sujeta la posibilidad de hacer venta de bienes si la situación así lo exige para cumplir los fines sociales previstos.

Cómo evitar que Hacienda se apropie de tus ahorros

Acciones simples que mantienen tu cuenta activa

Impedir que tu dinero caiga en manos del Estado es más simple de lo que parece. Solo tienes que llevar a cabo alguna operación periódica, aunque sea de escasa entidad (una pequeña entrada, una salida simbólica o cualquier cosa, incluso hacer un cambio de tus datos personales en el banco). Con cualquier acto que demuestres que todavía estás en el ejercicio de tu derecho de propiedad respecto de aquella; no puedes considerar aquella cuenta como una cuenta abandonada.

La importancia de vigilar todas tus cuentas bancarias

En numerosas ocasiones, las cuentas olvidadas derivan de herencias, cuentas de ahorro de largo recorrido o productos financieros de escasa utilización durante algunos años. Así que lo mejor es que revises ese tipo de cuentas, ya que no importa el saldo que posean, estas cuentas siempre te pueden generar el riesgo de que, si no hay movimiento, la cuenta pueda ser considerada verdaderamente abandonada, en cuyo caso su saldo se transferiría al Estado.