Las encuestas de Tezanos son de risa. No sólo dan una ventaja disparatada al PSOE, su partido. Sino que dicen lo que el Gobierno quiere oír en cada momento. Si el director del CIS fuera menos sectario y un punto más inteligente, de vez en cuando daría una satisfacción a la oposición, lo que otorgaría cierta credibilidad a sus sondeos. Pero le puede el carné. Al final, la cabra tira al monte. No es extraño que un juzgado de Madrid haya admitido a trámite una querella de Vox por presunta malversación de fondos públicos.

Contenido Exclusivo para suscriptores

Para poder acceder a este y otros contenidos debes de ser suscriptor.

¿Ya estás suscrito? Identifícate aquí