La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha asegurado este domingo que su pretensión no es ser candidata a la presidencia del Gobierno ni concurrir a las próximas elecciones generales como candidata de Unidas Podemos, "si yo me quisiera presentar a las elecciones, lo diría": "Ya me va conociendo España y no me quiero presentar a las elecciones". Preguntada por su posible pretensión para aspirar la presidencia del Gobierno asegura que "no estoy en eso y lo digo con sinceridad". Afirma que ha sido "franca" ante la sociedad española ha reiterar que su intención no es "trabajar miles de horas por una candidatura electoral".

Díaz asegura que actualmente está volcada en su labor como ministra y en abrir "una conversación con la sociedad española" pero no para encarrilar un "proyecto político": "Creo que nuestro país está hastiado de proyectos políticos. Yo quiero cambiar la vida de la gente de verdad, por eso me seduce más lo pequeño. Lo que voy a hacer es abrir una conversación con los sectores profesionales de la sociedad española", asegura en una entrevista concedida a 'El País'.

Asegura que en realidad su pretensión no pasa ni por ocupar la vicepresidencia ni la presidencia del Gobierno sino por mejorar el país: "¿Sueño con volver a mi Galicia? Sí, es verdad. Y luego digo que voy a trabajar desde el lugar que me toque para que no gobierne la ultraderecha. ¿Para eso hay que ser candidata? No. Lo he hecho toda mi vida desde que era una joven abogada. No hay que ser candidata para eso".

Respecto a la reforma laboral aprobada recientemente y el rechazo que ha generado en los socios del Gobierno, la ministra reitera la validez de lo pactado entre los agentes sociales: "Creo que es muy difícil decirle que no a esta norma. Quien la haga fracasar tendrá que explicarle a los trabajadores". Recuerda que aspectos como la recuperación de las condiciones de despido anteriores a la reforma de 2012 no figuraban en el acuerdo de Gobierno entre el PSOE y Unidas Podemos "porque el PSOE no quiso" y por eso no se ha incluido en la negociación, "yo me debo a mis acuerdos y los cumplo".

Díaz agradece la actitud de sindicatos y patronal para alcanzar un consenso y muestra el "agradecimiento absoluto" a algunos miembros del Ejecutivo. Cita a Pedro Sánchez y el papel "determinante" de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para que la reforma saliera adelante. En sus referencias al Ejecutivo no figura la ministra Calviño, con quien las diferencias han sido notables en las últimas semanas. Ha apuntado que esta norma "no era sencilla" para el actual Ejecutivo, en el, ha reconocido, "hay muchas voces" y "muchas formas de pensar".

En cuanto a Cataluña, ha defendido el diálogo, del que nunca se debió haber salido, y ha abogado por "una España en la quepan todas las Cataluñas y todas las Galicias, porque hay muchas Cataluñas, muchas Galicias y muchas realidades diferentes".