El consejero de Interior de la Generalitat, Joan Ignasi Elena, comparecerá ante el Parlament para explicar la remodelación de la cúpula de los Mossos d'Esquadra que tanto la oposición como algunos sindicatos han interpretado como una "purga" del equipo del ex jefe del cuerpo, Josep Lluís Trapero.

Unos cambios que Elena ha defendido este miércoles. "Los cambios en la dirección de los Mossos es prerrogativa del conseller" ha argumentado el responsable de Interior. "Hay un proyecto, una idea y el conseller tiene la responsabilidad de decidir quienes son los mas adecuados para sacar adelante este proyecto" ha defendido Elena en la presentación del plan de feminización de los cuerpos de mossos, bomberos y agentes rurales de la Generalitat

Elena ha argumentado además que "esto ha pasado siempre, todos los consejeros han escogido máximo responsable de mossos". Y ha destacado, para defender su elección, que él ha optado por "una prefectura de cuatro personas, paritaria y coral". "Cambiar no es purgar, cuando se cambia al comisario de investigación no se purga, son cambios que se han producido siempre".

Decisión aplaudidad por JxCat y ERC

Una remodelación que ha implicado la sustitución de 30 altos cargos de los Mossos, entre ellos el jefe del área de Investigación Criminal, el comisario Toni Rodríguez. Pese a lo cual se ha convertido en la decisión menos contestada en el seno de la coalición independentista. De hecho el ex consejero de Interior de Junts, Quim Forn, ha defendido los cambios de Elena.

Desde que Pere Aragonés tomó posesión como presidente de la Generalitat ERC y JxCat han disentido sobre la composición de la mesa de diálogo con el Gobierno y su convocatoria, sobre la estrategia independentista, el futuro del Aeropuerto de El Prat o los socios con los que aprobar los presupuestos de la Generalitat.

Casi cada decisión de un miembro del Govern ha sido cuestionada por el otro partido, más o menos soterradamente, desde la renovación de TV3 al toque de queda. Menos la purga completada este lunes por el Departamento de Interior en la cúpula de los Mossos d'Esquadra. La clave, probablemente, es la dirección "cremallera" pactada por republicanos y junteros, en la que cada pieza tiene un contrapeso de color político contrario.

Equilibrios entre ERC y JxCat en la nueva cúpula

Así, la sustitución de Trapero por Josep Maria Estela, un comisario en la órbita de ERC, se compensa con la recuperación del ex jefe de los Mossos Eduard Sallent, designado en su momento por Junts. El partido de Carles Puigdemont sigue contando además en la cúpula de Interior con Pere Ferrer, director general de los Mossos. Convenientemente tutelado por el secretario general del Departamento, Oriol Amorós, hombre con larga trayectoria en Esquerra al que los sindicatos señalan como auténtico hombre fuerte de Interior.

Pero la remodelación completada este lunes va mucho más allá del habitual juego de equilibrio de poder, advierten desde la oposición. Se parece mucho más a una auténtica purga del equipo directivo recuperado por Trapero con la intención de sustraer al cuerpo policial del control político. Un temor que confirman sindicatos como Uspac.

Por eso la oposición salió en tromba este martes, forzando a Elena ha asumir que tendrá que dar explicaciones ante el Parlament. El primero ha sido el líder del PSC, Salvador Illa, pero rápidamente se han unido Vox, PP, Cs, y los comunes a la exigencia de explicaciones, que ha acabado secundando también la CUP.

Rechazo de la oposición

"Con todo el respeto, todo parece una purga. Nos tiene muy preocupados", advirtió Illa. El líder de los socialistas catalanes señaló que las explicaciones de Elena, aludiendo al plan de feminización de cuerpo que se presenta hoy "no son convincentes", por lo que mostró su temor a un intento de controlar políticamente a los Mossos. "Es una posibilidad", reconoció.

"Estamos muy preocupados con esta purga que están sufriendo los Mossos. Es de una extrema gravedad y es evidente que el separatismo ha aprendido y que la Generalitat prepara un segundo procés, eliminando a aquellos que defienden la ley y luchan contra la corrupción", ha señalado la diputada del PP Lorena Roldán.

También Cs ve una "purga" en los cambios al frente de los Mossos."Esta sospecha de purga nos hace temer que se pretende convertir cuerpo policial en una policía política" señaló Carlos Carrizosa, que fue más allá de la petición de comparecencia de Elena y reclamó una comisión de investigación al respecto en el Parlament.

"Tanto JxCat como ERC tienen muchas cosas que ocultar, una policía domesticada les vendría muy bien, por eso pedimos la comparecencia de consejero de Interior y del director general de los Mossos para que expliquen esta presunta purga" añadió Carrizosa.

Presión de los socios parlamentarios

El morado Lucas Ferro recordó, por su parte, que CatEC fue el primer partido en pedir la comparecencia de Elena, tras anunciarse el cese del comisario Toni Rodríguez al frente de la Comisaría de Investigación Criminal, un día después del cese de Trapero. "Cuando alguien que debería ser premiado por su trabajo es supuestamente castigado es una situación que merece una comparecencia pública" advirtió Ferro, reclamando al consejero de Interior que comparezca a petición propia antes de ser forzado por la oposición.

También el otro socio habitual del Govern, la CUP, reclama explicaciones del consejero. "Lo normal es que después de cambios de esta magnitud el conseller comparezca por una cuestión de transparencia" advirtió Carles Riera. Aunque el líder antisistema también dejó claro que a la CUP le importa poco la diligencia del ex responsable de Investigación Criminal.

Su objetivo, recordó Riera, es cambiar los protocolos policiales en manifestaciones independentistas y desahucios. "Lo que realmente nos preocupa es que los mossos sigan manteniendo intervenciones militarizadas para desahuciar familias, la impunidad con la que la policía sigue actuando contra la disidencia política, nos preocupan las pistolas táser y las pelotas de foam".