Joan Ignasi Elena no ha convencido a nadie. El consejero de Interior ha defendido en el Parlament que los Mossos deben tener una "orientación política" y se ha escudado en esa potestad para defender el cese del comisario jefe Josep Maria Estela. Un cese que llega nueve meses después de su nombramiento y que Elena no ha justificado más allá de "diferencias en los tiempos de la feminización del cuerpo".

"Cuanto más habla menos nos dice y más cerca está de la reprobación" le ha respondido el portavoz de PSC-Units, Ramon Espadaler. El también ex consejero de Interior le ha afeado "la purga de 36" y le ha recordado que los comisarios "no son personal eventual" que un responsable político pueda nombrar y cesar a conveniencia. Y ha ironizado sobre su "prefectura coral" apuntado que "el profeta de la coralidad" nombra comisarios "por el método de ordeno y mando".

Espadaler no ha sido el único en cuestionar su continuidad al frente de los Interior. Vox, PP y Cs también han pedido su cese. Aunque más inquietante para él es constatar que tampoco a convencido a Comunes y la CUP, ni a sus socios hasta hace 15 días, JxCat. Todos ellos han coincidido con los socialistas en que sus argumentos sobre el cese de Estela "no cuelan".

Humillaciones a Estela y Trapero

En este contexto, tanto Espadaler como el portavoz de los Comunes, David Cid, o el de Cs, Matias Alonso, le han reprochado el via crucis al que se ha sometido a Estela retransmitido con filtraciones en determinados medios de comunicación.

"Tenía derecho" a cesar a Josep Lluís Trapero, le ha reconocido Cid, "pero no hacía falta humillarlo de comisaría en comisaría sin despacho, y tenía derecho a cesar a Estela, pero no hacía falta el gran hermano" de sus desavenencias filtradas a los medios.

Matías Alonso ha señalado además las dudas sobre el perfil del comisario Eduard Sallent, que ha sustituido a Estela al frente de los Mossos. Dudas que han compartido Vox y el PP, recordando la visita de Sallent, junto al director de la policía, Pere Ferrer, a Oriol Junqueras en la prisión de Lledoners.

Dudas sobre Sallent

"Ahí se pactó un cambio de cromos" ha asegurado Alonso, apuntando a un acuerdo para relevar a Trapero, entonces comisario jefe bajo mando del consejero de Junts Miquel Samper, cuando se produjera un cambio de gobierno. "Lo indudable es que Estela no servía a los intereses políticos de ERC" ha concluido el portavoz naranja.

El relevo de Estela "ha sido una decisión difícil, pero era necesario para seguir avanzando" ha afirmado Elena como único argumento para explicar su decisión. Tras lo cual ha insistido en su "plena confianza en Sallent" y las intendentes Rosa Maria Bosch y Montse Escudé, que ahora integran junto a él la prefectura de los Mossos.

El consejero ha descartado además un nuevo relevo en la jefatura de los Mossos cuando Bosch complete el curso de habilitación como nueva comisaria, como se apuntó tras el cese de Estela. Y ha negado las "insinuaciones de injerencias" después que su antecesor denunciara las interferencias de Sallent en investigaciones policiales.

Intentos de manipulación que han sido denunciados por el ex comisario de la Comisaría General del Información, Toni Rodríguez, cuyas denuncias fueron amparadas por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en el caso sobre el escolta de Carles Puigdemont.