La Junta directiva del Real Madrid, reunida este mediodía, ha emitido un comunicado a su conclusión en el que confirma que se personará en la causa como acusación particular en el 'caso Negreira'. En el escrito afirma que ha tomado conocimiento de "las graves acusaciones formuladas" por la Fiscalía de Barcelona contra el F. C. Barcelona, dos de sus presidentes, Josep María Bartomeu y Sandro Rosell, y los exdirectivos Albert Soler y Óscar Grau, "sobre la base de potenciales delitos". Recuerda que la acusación que pesa en este procedimiento hace referencia a delitos, entre otros, "de corrupción en el ámbito deportivo, en el marco de las relaciones entabladas por dicho club con quien fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira".

La Junta Directiva manifiesta su profunda preocupación por la gravedad de los hechos y, tras reiterar su plena confianza en la acción de la Justicia, acuerda que "en defensa de sus legítimos intereses" se personará en el procedimiento en cuanto el juez lo abra a las partes perjudicadas.

Hasta el comunicado emitido hoy la estrategia del Real Madrid respecto a este caso había sido más que discreta. Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del Real Madrid, se limitó a comentar que «en el Real Madrid hay que respetar los tiempos de la justicia y ahora debemos esperar a que concluyan las investigaciones de la Fiscalía que determinen lo que ha pasado».

Con esta decisión se abre un escenario que hasta el momento se resistía, ya que pese a la rivalidad deportiva extrema entre Real Madrid y FC Barcelona las relaciones entre clubes atraviesan una de sus mejores etapas. Los lazos entre los mandatarios merengues y culés son más fuertes que nunca debido a sus intereses comunes en la Superliga y en su rechazo a la gestión de Javier Tebas al frente de LaLiga.

Denuncia de la Fiscalía

Este caso que salpica al Fútbol Club Barcelona amenaza con tensar como nunca las relaciones en el fútbol español. En el escrito presentado ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona, consultado por El Independiente, el Ministerio Fiscal afirma que «a través de los presidentes ARF y JMBF [en referencia a Rosell y Bartomeu] el FCB alcanzó y mantuvo un acuerdo verbal estrictamente confidencial con el denunciado JMEN [Negreira], a fin de que, en su calidad de vicepresidente del CTA y a cambio de dinero, realizase actuaciones tendentes a favorecer al FCB en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el Club, y así en los resultados de las competiciones; árbitros cuya designación para cada partido de las competiciones españolas oficiales de ámbito estatal y profesional se llevan a cabo en el seno del CTA, organismo encargado, además, de las evaluaciones -en las que participaba el denunciado- para los ascensos y descensos de categoría de los árbitros, así como de la proposición de candidatos a árbitros internacionales».

La denuncia se dirige contra el expresidente del club Josep María Bartomeu a pesar de que fue él quien puso fin a los pagos a Negreira porque los supuestos informes verbales de «asesoramiento» se extendieron desde 2001 hasta 2018, cuando él estaba al frente del club. La sorpresa respecto a lo que se habría filtrado ha sido que el Ministerio Público también ha dirigido sus acciones contra el expresidente Sandro Rosell a pesar de que hay dudas de que los supuestos delitos cometidos durante el periodo en que estuvo frente al club hayan prescrito.

La denuncia finalmente se ha presentado por los presuntos delitos de corrupción entre particulares en el ámbito deportivo, administración desleal y falsedad. También se dirige contra Negreira y los exdirectivos del club Óscar Grau y Albert Soler. La Fiscalía cifra en más de siete millones los importes cobrados por Negreira del Barça entre 2001 y 2018: «Los pagos realizados por el FCB al denunciado JMEN, desde el 2001 al 2018 durante su vicepresidencia en el CTA, superaron los 7,3 millones de euros según el histórico de importes facturados anualmente por las entidades D 95 S.L y N SCP».