La Junta Electoral Central (JEC) ha dado diez días a la Mesa del Parlament para comunicar qué piensa hacer con el escaño de la presidenta de la cámara, Laura Borràs, tras ser condenada a 13 años de inhabilitación por un delito de prevaricación. La JEC pone así la pelota en el tejado del Parlament, y sigue la pauta seguida con el caso del diputado de la CUP Pau Juvillà, inhabilitado por una condena por desobediencia.

La JEC ha adoptado esta decisión después de tres horas de reunión en la que se ha debatido también la posibilidad de trasladar esa responsabilidad a la Junta provincial de Barcelona. De este modo, fuerza a posicionarse a Esquerra, que se ha desmarcado de los intentos del PSC de deponer ya a Borràs, pero se desmarca también de la pretensión de la líder de Junts de asimilar su caso al de los condenados por el 1-O.

La decisión de la JEC permite ganar tiempo a Borràs, pero todos los expertos coinciden en que la decisión de la Junta solo puede ser la de retirar el acta a Borràs, teniendo en cuenta los precedentes de Quim Torra y Pau Juvillà.

En el caso de Torra, además, se suma la ratificación del Tribunal Supremo, que en la respuesta al recurso presentado en su día por el ex presidente catalán consideró que la inhabilitación se puede asociar a incompatibilidad sobrevenida. Con estos precedentes, Borràs ha ganado tiempo con el traslado de su caso a la Junta Electoral de Barcelona, pero el resultado presumiblemente será el mismo.

Recurso de Borràs

Paralelamente Borràs ha presentado recurso de casación contra la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). El recurso de Borràs ante el Tribunal Supremo esgrime la supuesta vulneración de hasta nueve derechos fundamentales durante el proceso seguido en el TSJC bajo la presidencia del magistrado Jesús María Barrientos.

El presidente del PSC, Salvador Illa, ha recordado este jueves que "llevamos más de seis meses con la presidencia del Parlament bloqueada, ya advertimos cuando se la nombró a la presidenta de la situación en que se encontraba", ha señalado Illa, en referencia al proceso abierto por su gestión al frente de la Institución de las Letras Catalanas (ILC). Por ello, el socialista ha señalado a ERC, Junts y CUP, los grupos que la escogieron como presidenta, como responsables de solucionar la situación de interinidad.

El PSC exige a ERC que actúe

"No tenemos que esperar a que resuelvan los problemas por nosotros", ha añadido Illa en referencia a la futura decisión de la Junta Electoral, "por eso lamento la inacción de ERC, Junts y la CUP". El socialista ha abogado por que sea el Parlament "el que resolviera esta situación, que no hubiéramos tenido que llegar aquí, que Borràs en un ejercicio de responsabilidad diera un paso al lado. Visto que ella no lo hace, que los partidos que la nombraron hubieran asumido la responsabilidad de resolverlo.

El PSC presentó la semana pasada una proposición de ley que reforma el reglamento del Parlament para permitir el cese de la presidenta. El texto se votará la próxima semana, pero Esquerra se ha desmarcado de esta vía.

Condena por corrupción

La presidenta de Junts fue condenada el pasado 30 de marzo a 4 años de cárcel y 13 de inhabilitación por los delitos de prevaricación y falsedad documental. Tras conocerse la sentencia, Cs, PP y Vox elevaron la petición a la JEC para que retirara a Borràs el acta como diputada autonómica.

Durante el proceso, el Tribunal Superior de Justicia dio por probado que Borràs había ordenado el troceamiento de contratos de la ILC para beneficiar a su colaborador, Isaías Herrero. Borràs dio indicaciones además a Herrero de cómo presentar varios presupuestos, la mitad falsos, para simular la concurrencia en los contratos que se adjudicó por un valor total de 330.000 euros.