La Policía Nacional ha detenido en Madrid y Barcerlona a tres menores altamente radicalizados. La operación, llevada a cabo por la Comisaría General de Información, consiguió encontrar manuales para fabricar la "madre de Satán", un explosivo de gran poder de destrucción empleado por el Daesh.

Las detenciones se produjeron en la madrugada del pasado lunes dentro de la "operación Dardasha". Además de los arrestos, los agentes se hicieron con una gran cantidad de elementos electrónicos y diferente documentación que está siendo analizada.

A los tres detenidos, dos en Madrid y otro en Barcelona, se les acusa de ser los presuntos autores de los delitos de adoctrinamiento, auto capacitación terrorista y conspiración de homicidio. La operación ha contado con la colaboración de las Brigadas Provinciales de Información de Valencia, Madrid y Barcelona, estando bajo la dirección de la Sección de Menores de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

La actuación policial se ha producido gracias al "ciberpatrullaje" en redes sociales que llevan a cabo los investigadores. Los agentes pudieron detectar varios pergiles que profesaban una ideología de carácter yihadista. Desde ellos se abogaba y justificaba el uso de la violencia en defensa de la religión islámica. Se enaltecía a los integrantes de grupos terroristas, aprobando y justificando sus acciones armadas, y se señalaban posibles objetivos, llegando incluso a mostrar su intención de cometer una acción contra aquellos que no estuvieran de acuerdo con ellos, considerados por ellos apóstatas.

Menores radicalizados

Cuando la Policía indagó en los mencionados perfiles, constató que se trataba de tres menores, todos estudiantes. La proliferación de menores radicalizados es una tendencia que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, así como los expertos en la materia, están viendo en auge.

El pasado 28 de noviembre dos chavales, de 15 y 16 años, fueron detenidos en Plasencia y Palma de Mallorca. Se les acusa de pertenencia a grupo terrorista, adoctrinamiento y autoradicalismo. El Juzgado Central de Menores de la Audiencia Nacional, tras tomarles declaración, envió a ambos a un centro de régimen cerrado. Ambos habían nacido en España, aunque sus padres eran de origen marroquí. 

Ambos jóvenes, a pesar de la distancia física, estaban perfectamente coordinados, hasta el punto de crear un "organismo no oficial" de propaganda del Estado Islámico. Los investigadores se sorprendieron por los "conocimientos muy avanzados" que tenían los dos, llegando a un nivel de sofisticación altísimo, hasta el punto de crear un logo propio para distinguir al canal de difusión.

La propaganda yihadista es la piedra angular de la ideología terorrista. Con ella consiguen que una persona se autoconvenza de los postulados de las organizaciones y puedan llegar a cometer atentados sin necesidad de una estructura orgániza. Tras la caída de los califatos en Siria e Irak, en la actualidad los canales no oficiales, como es el caso, han alcanzado una gran relevancia para el Daesh.