Jornada intensa la vivida este miércoles en el Congreso de los Diputados. El Gobierno tenía atado su proyecto de ley de movilidad sostenible antes de la votación que este miércoles aconteció en el pleno. Aunque los focos estaban puestos en Podemos, que durante días venían rechazando la medida si no se paralizaban las obras de ampliación del puerto de Valencia o del aeropuerto del Prat en Barcelona, el PSOE supo de la viabilidad de su iniciativa desde al menos una hora antes de procederse a la votación por una ausencia en el PP, la del diputado Guillermo Mariscal. Y aunque se respiraba tranquilidad, pronto trascendió que había habido un problema con el voto telemático del diputado Mikel Legarda, del PNV, que pese a todo sí estuvo presente en la votación.
Con todo, y ante el riesgo, el ministro de Transportes, Óscar Puente, negoció hasta minutos antes de la llamada a votar con la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, para arrancar su voto a favor y asegurar que ese pequeño problema no trastocaría la medida. Así fue. Finalmente, los cuatro diputados de Podemos se abstuvieron a cambio de garantizar que para llevar a cabo la ampliación del Prat, el proyecto "se someterá a un proceso especialmente intenso de información pública, y a la consulta de los diferentes organismos y administraciones territoriales para favorecer la participación y la transparencia".
Con esta segunda medida con luz verde, España, además, se asegura en parte poder desbloquear 10.000 millones de euros en fondos europeos para movilidad sostenible. Fuentes del Gobierno matizan que la totalidad de esas cantidades dependerán de otras reformas y de momento no hay intención de solicitarlo. Se trataría de un séptimo pago y por ahora el Ejecutivo está inmerso en el quinto por parte de Bruselas.
Concretamente, al Gobierno le valía ya incluso con una negativa de Podemos al conocerse que el diputado del PP, Guillermo Mariscal, secretario tercero de la Mesa del Congreso, estaba ausente y no había votado las enmiendas previas y, de hecho, tampoco se personó en la sesión previa del martes. El Grupo Parlamentario Popular solicitó a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, que Mariscal pudiese ejercer el voto telemático a todas las iniciativas de la semana durante la reunión de este martes. Pero los motivos esgrimidos para su ausencia no entrarían dentro de los supuestos que contempla el reglamento de la Cámara. Fuentes parlamentarias trasladaron al conocerse el asunto que Mariscal se encontraría de "viaje de novios" tras haber contraído matrimonio recientemente.
Esta baja en el PP redujo a 170 los 'noes' de la oposición de PP (136 de 137), Vox (33) y UPN (1). Sin embargo, por los pasillos del hemiciclo trascendía que Legarda había cometido un error a la hora de ejercer su voto de forma telemática, aunque él mismo estuvo presente durante el proceso presencial. Frente a esa cifra de la derecha, se impuso una mayoría simple de 174 diputados junto a la abstención de los cuatro representantes de Podemos y el error de Legarda.
El giro de los morados en esta materia urbana no fue el único cambio protagonizado durante la jornada. Después de denunciar que el real decreto ley para el embargo a la compraventa de armamento a Israel es un "coladero" y un "fake", los de Belarra anunciaron que lo apoyarían con un contundente 'sí'.
Tanto por el giro de Podemos como el balón de oxígeno que supuso la ausencia en el PP, permitieron al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, salir airoso de una jornada en la que se avistaba un doble golpe parlamentario en un momento de inestabilidad y tras los fracasos en septiembre de la reducción de jornada laboral o del traspaso de las competencias de inmigración a la Generalitat de Cataluña.
Ahora bien, desde Podemos se alerta que el voto al decreto es un gesto para que los socialistas no arremetan contra ellos para buscar culpables a los que responsabilizar. Aseguran que en las próximas semanas empezarán a conocerse informaciones sobre la continuidad de comercialización y paso de armamento por nuestros puertos que evidenciarán que el texto no termina con nada. Para el giro con el decreto, los morados afirman que no han recibido ninguna compensación y que el PSOE en ningún momento se ha movido de su propuesta inicial. Se desconoce qué cuestiones han podido pactar Puente y Belarra para sacar adelante la ley de movilidad.
El Gobierno cierra así una jornada complicada con ayuda extra del PP. Hay que remontarse a febrero de 2022, en la jornada de votación de la reforma laboral de Yolanda Díaz, en la legislatura anterior, para encontrar un hecho similar. Por entonces, el diputado Alberto Casero, ya fuera de la primera línea del partido, cometió un error a la hora de realizar el voto telemático. Se encontraba en casa por enfermedad y indicó que pese a votar en contra, el sistema falló. Un argumento que rechazó la mesa.
La diferencia con ese hecho, en una jornada caótica, frenética y repleta de confusión es que los populares conocían desde el martes a las diez de la mañana que, de no fallar ningún otro diputado, como por ejemplo José Luis Ábalos, ahora en el Grupo Mixto, la medida del Gobierno saldría adelante.
Te puede interesar
2 Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registradoLo más visto
hace 23 minutos
Muchas veces se dice;» no ha ganado el partido, lo ha perdido el otro «.
Pués eso le pasa al PP más de lo que quisiera.
Se lo tendrá que hacer mirar.
hace 2 horas
Siempre falta alguien o se equivoca. La cuestión es que el PPSOE apoya a Sánchez