Para los socialistas, "nada cambia". Las relaciones con Junts, siempre tortuosas, quedan como estaban. Nada está completamente roto ni la legislatura va a colapsar. La respuesta a la "reflexión" a la que invitaba Carles Puigdemont al Gobierno es clara: "Mano tendida" y "diálogo". "Nada se da por perdido", ni tan siquiera los Presupuestos Generales del Estado de 2026.
(Noticia en ampliación)
Te puede interesar