Carles Puigdemont no ha tardado en reaccionar a la decisión del Tribunal Supremo, que este jueves ha acordado por unanimidad declarar su competencia y abrir causa para investigar y, en su caso, enjuiciarle por delitos de terrorismo en relación con los hechos investigados en el caso ‘Tsunami Democràtic’. Tanto Puigdemont como desde Junts han criticado la decisión y acusado a la judicatura de "hacer el ridículo" con la acusación de terrorismo. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se ha sumado a las críticas acusando al Tribunal Supremo de actuar por "puro partidismo".

Así, Puigdemont relaciona la decisión del Tribunal Supremo con una información periodística para concluir que "el Màtrix judicial español ha adaptado la máxima del mal periodismo: no dejes que la realidad estropee una buena imputación". "Solo falta que me salga una cuenta en Panamá" ironiza el líder de Junts en su cuenta oficial de X -antes twitter-.

El portavoz de Junts, Josep Rius, ha acusado al Supremo de "bajar a la arena política para interferir en la voluntad de legislador, y después ellos piden respeto por la separación de poderes". En una comparecencia de urgencia convocada para responder a la decisión judicial, Rius ha advertido que "ya hicieron el ridículo en Europa con la acusación de rebelión, después sedición, y ahora doblan la apuesta con una acusación de terrorismo".

El portavoz independentista ha advertido que "confundir el ejercicio del derecho de manifestación con terrorismo confirma la falta de calidad democrática en la judicatura española" y se ha preguntado si el Supremo espera que "en Europa se creerán esta tercera acusación a Puigdemont".

Negociación de la amnistía

Rius no ha querido comentar, sin embargo, la incidencia de esta decisión en la negociación de la Ley de amnistía que PSOE y Junts mantienen abierta. "Ya saben como negociamos, con total discreción" se ha limitado a apuntar el portavoz independentista. Desde el partido se remiten a las palabras del propio Puigdemont, que este miércoles apuntaba desde los pasillos del Parlamento Europeo que ambas formaciones siguen negociando.

"Estamos ahora en un momento importante de la legislatura que es la ley de amnistía. Nos concentramos en eso y esperamos que al final haya un acuerdo, pero no puedo decir nada más", apuntó el líder de Junts, que recetó "realismo" para cerrar con éxito las negociaciones.

Aragonès tacha la decisión de "aberración jurídica sin precedentes" para boicotear la ley de amnistía

Igualmente indignado se ha mostrado Pere Aragonès, quien ha tachado la decisión del Supremo de "aberración jurídica sin precedentes". El presidente catalán ha coincidido con Junts en que con esta decisión el TS "criminaliza el derecho a la protesta" con una acusación "basada en presupuestos falsos". Por ello ha recriminado al alto tribunal que "entre a hacer política partidaria" con el único objetivo de "boicotear ley amnistia". Para Aragonès "esta es la razón ultima por la que el Supremo ha decidido acusar de terrorismo"

La decisión del Supremo

Con esta decisión Sala de lo Penal del Tribunal Supremo se desmarca del criterio de la Fiscalía que hablaba de falta de indicios y "meras conjeturas" en la vinculación del líder de Junts con las protestas violentas de 2019 por la sentencia del procés, e investigará al expresident de la Generalitat y ahora eurodiputado, así como al diputado del Parlament Ruben Wagensberg.

El Tribunal Supremo, que ha desginado como instructora por turno a la magistrada Susana Polo, concluye que es "necesario y pertinente que sean llamados al procedimiento, a fin de ser oídos como investigados, con todos los derechos y garantías previstas en nuestro ordenamiento jurídico".