El titular del Juzgado de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, ha acordado prisión provisional "instrumental" para María Soledad Ipaguirre, más conocida como 'Anboto', por el atentado que ETA perpetró en la localidad de Santa Pola (Alicante) en 2002. El juez toma esta decisión, que no tiene efectos reales puesto que la exjefa de la banda terrorista se encuentra ya en la cárcel, mientras espera a que Francia conteste a la petición de procesamiento de la etarra para esta investigación.

En un escrito, al que ha tenido acceso El Independiente, el juez decreta la "prisión provisional incondicional y comunicada" de 'Anboto' por delitos de atentado terrorista, asesinato terrorista, lesiones y estragos. La investigación fue reabierta en marzo de 2022 después de una querella de la Asociación Dignidad y Justicia que busca procesar a los cerebros --y no sólo a los responsables materiales-- del atentado que terminó con la vida de una niña de seis años, Silvia Martínez Santiago, y Cecilio Gallego, de 57, que esperaban el autobús junto a la casa cuartel de la zona.

El 29 de mayo, el instructor emitió una Orden Europea de Detención para recabar el consentimiento de las autoridades galas y poder procesar tanto a 'Anboto' como a Ainhoa Múgica (alias 'Olga') como exjefa de la banda. Ambas fueron detenidas en ese país y entregadas a España por otra causa, por lo que de acuerdo al principio de especialidad es necesario pedir al Estado vecino un permiso para investigar a las terroristas por otros hechos distintos.

Según los informes policiales que constan en el sumario, 'Anboto' ejerció la responsabilidad del aparato militar de ETA entre principios de 1993 y finales de 1998, "fecha en la que empezó a desarrollar otras funciones directivas relacionadas con la gestión de las finanzas de la organización terrorista y el control de los 'zulos' de la misma". Entre las presuntas responsabilidades de 'Anboto' estaba el control de los comandos legales de la organización, realizando funciones de coordinación de las comunicaciones, entregas de material explosivo e instrucciones sobre cómo utilizar dicho material, así como fijar objetivos potenciales de las acciones terroristas.

A partir de finales de 1998, la terrorista pasó a desempeñar labores de
responsabilidad sobre las estructuras de ETA que controlaban el dinero procedente de la extorsión y el “impuesto revolucionario” ("GEZI"), la contabilidad de la organización terrorista y la gestión de determinados “zulos”, bajo la dependencia del aparato político. Esta actividad se prolongó hasta el día 3 de octubre de 2004, cuando fue detenida en Salies de Bearn (Francia), junto a su pareja sentimental y responsable del aparato político Miguel Albisu Iriarte, alias 'Antza'.

Francia no contesta

Por este atentado contra la casa cuartel fueron condenados en mayo de 2012 Óscar Celarain y Andoni Otegui como autores dilectos del delito. Sin embargo, en las investigaciones que la Audiencia Nacional lleva abriendo desde el año pasado se trata de escalar la responsabilidad y lograr procesar a los etarras que estaban en la cúpula del aparato terrorista.

García Castellón acordó el 28 de julio de 2022 la citación de 'Anboto', pero su defensa quiso acogerse al principio de especialidad por el que, como se ha relatado, se ha de pedir permiso a Francia. Las fuentes jurídicas consultadas señalan que este país en casos puntuales ha denegado la ejecución de estas entregas porque el Estado solicitante no ha adoptado ninguna medida cautelar. Por eso, refieren, a veces se utiliza esta prisión provisional para evitar que los tribunales franceses denieguen la entrega.

'Anboto' se encuentra actualmente cumpliendo condena en el Centro Penitenciario de Álava. Tanto la Fiscalía como la asociación Dignidad y Justicia y el resto de acusaciones estuvieron de acuerdo en impulsar la prisión provisional. Desde junio, García Castellón espera la respuesta de las autoridades gala y fuentes jurídicas señalan cierta preocupación porque en las últimas investigaciones Francia no está colaborando en estas entregas.