Ni los mejores pronósticos auguran que la expresidenta de Adif Isabel Pardo de Vera pueda librarse de la imputación en el 'caso Koldo' a corto plazo, toda vez que el Tribunal Supremo ha señalado que ve indicios de delito en su actuación por la contratación "caprichosa" e "irregular" de Jésica Rodríguez, la que fuera pareja del exministro de Transportes, en una empresa pública. La pelota está ahora en manos de la Audiencia Nacional y, mientras, Pardo de Vera ya tiene atada su defensa que, según confirman fuentes jurídicas a El Independiente, correrá a cargo de la exabogada del Estado Rosa María Seoane.

Seoane trabajó codo con codo con Pardo de Vera en Adif cuando bajo su presidencia fue secretaria general del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias. Allí estuvo la abogada del Estado hasta diciembre de 2018, momento en el que fue nombrada coordinadora de la acusación en el juicio de los líderes del proceso independentista en el Tribunal Supremo y tuvo que defender el delito de sedición.

La letrada es, por tanto, una persona de la absoluta confianza de Pardo de Vera, según confirman fuentes cercanas a esta última. De hecho, Seoane acompañó a la expresidenta a las dos citas en las que acudió como testigo ante el juez, primero en la Audiencia Nacional y después en el Tribunal Supremo.

Seoane dejó en 2023 su responsabilidad en el área penal de la Abogacía del Estado para incorporarse a un bufete privado, en concreto, al despacho de José Ángel González Franco. Su carrera en los Servicios Jurídicos del Ejecutivo fue extensa con experiencia, precisamente, en asuntos de mascarillas como la querella que Vox interpuso contra varios cargos del Ministerio de Sanidad, cuya defensa asumió ella.

Ahora, en el sector privado, la letrada se hizo cargo, por ejemplo, de la defensa de Iberdrola Generación en el juicio de la Audiencia Nacional por supuestamente inflar el precio de la luz. Causa que terminó en absolución.

El Supremo ve delito en Pardo de Vera

Tanto en las fotografías de Pardo de Vera entrando a declarar en la Audiencia Nacional el pasado 16 de septiembre para explicarle al magistrado Ismael Moreno el asunto de las mascarillas, como este 5 de marzo cuando acudió ante el juez Leopoldo Puente al Tribunal Supremo para centrarse más en la responsabilidad de Ábalos y Koldo García, aparece acompañada de Seoane.

Si en sendas ocasiones la letrada no pudo entrar en Sala porque era una cita como testigo, a partir del momento de su imputación será ella la que decida la estrategia de defensa.

El juez instructor del alto tribunal ha remitido al juzgado de instrucción número 2 de la Audiencia Nacional todo el trozo de causa relacionado con Jésica Rodríguez. Tanto su contratación en Ineco --empresa que dependía del Ministerio de Transportes-- como en Tragsa, otra empresa pública, que depende del Ministerio de Agricultura, el número de horas que dicen dichas empresas que trabajaba y que, sin embargo, ella desmiente porque asegura que no tocó el ordenador nunca; y la declaración de la propia Pardo de Vera.

Ella dijo ante el fiscal Anticorrupción que Koldo y Ábalos le preguntaron cómo se hacían las contrataciones en la administración pública, pero que ahí terminó su intervención. En cambio, el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil evidencia que la expresidenta de Adif estuvo al tanto de cada paso que dio Koldo García con la joven para entrevistarla y conseguir rubricar el empleo por el que se le estuvo pagando más de mil euros durante dos años.