Ya sabemos que el calentamiento climático está provocando el deshielo de los polos. Pero incluso a los propios científicos les sorprende, en muchos casos, la velocidad con la que se está produciendo. Porque muchos glaciares aparentemente estables se están deshaciendo de manera muy rápida.

Precisamente esto es lo que ha querido comprobar un equipo de investigación liderado por Benjamin Wallis, glaciólogo de la Universidad de Leeds, que ha utilizado satélites para analizar el glaciar Cadman, una gigantesca masa de hielo que desemboca en la bahía de Beascochea, ubicada en la península antártica occidental.  

Como resultado de sus observaciones, publicadas este martes en la revista científica Nature Communications, el equipo ha podido comprobar que el glaciar retrocedió ocho kilómetros entre noviembre de 2018 y mayo de 2021. Y han conseguido encontrar la causa: la plataforma de hielo que se extendió más allá de tierra firme hasta el mar colapsó.

Los científicos creen que la plataforma de hielo, que estaba rodeada de aguas oceánicas más cálidas de lo habitual, "adelgazó" al quedarse sin conexión a tierra. Y a partir de ahí ya no pudo contener al glaciar y actuar como su contrafuerte, frenando su movimiento en dirección al mar.

Como resultado de esto, la velocidad a la que fluía el glaciar se aceleró rápidamente, hasta llegar al punto de duplicarse, lo que provocó que aumentarán la cantidad de icebergs que se desprendían de la masa de hielo y comenzaban a flotar en el mar.

"Nos sorprendió ver la velocidad a la que Cadman pasó de ser un glaciar aparentemente estable a uno en el que vemos un deterioro repentino y una pérdida significativa de hielo", explicó Wallis. "Lo que también fue curioso fue que los glaciares vecinos en esa parte de la Península Antártica occidental no reaccionaron de la misma manera, y eso puede darnos lecciones importantes para poder proyectar mejor cómo el cambio climático seguirá afectando a esta importante y sensible región polar", añadió.

El experto detalló que en su estudio reunieron datos de tres décadas, nueve misiones satelitales diferentes y mediciones oceanográficas in situ para comprender los cambios que están sucediendo en la Antártida. Algo que, según apuntó Willis, "demuestra lo importante que es contar con un seguimiento a largo plazo de las regiones polares de la Tierra con una gama de sensores que nos cuenten una parte diferente de la historia".  

Según los científicos, el glaciar Cadman se encuentra actualmente en un estado de "importante desequilibrio dinámico". El hielo del glaciar ha seguido adelgazando y la elevación se ha perdido a un ritmo de unos 20 metros al año. Esto equivale a la pérdida de altura de un edificio de cinco plantas cada año.  Y está provocando que cada año se viertan alrededor de 2.160 millones de toneladas de hielo del glaciar Cadman al océano en forma de icebergs.

Las importancia de las crestas submarinas

El equipo científico cree que las aguas más cálidas del océano "adelgazaron" gradualmente la plataforma de hielo del glaciar desde principios de la década de 2000. Pero consideran que ese proceso pudo comenzar en la década de 1970. Según explican, es probable que el agua cálida llegara a las profundidades, donde la columna de hielo del glaciar estaba anclada al fondo del mar. El resultado es que la plataforma de hielo comenzó a derretirse de abajo hacia arriba.  

Pero al analizar los datos oceanográficos submarinos, los investigadores observaron que una serie de estructuras rocosas submarinas llamadas crestas o umbrales y ubicadas a una profundidad de entre 200 metros y 230 metros, actúan como una barrera defensiva, desviando los canales de agua más cálida para que no lleguen a los glaciares. Pero advierten de que un aumento del calentamiento de los océanos podría comprometer la capacidad de las dorsales para proteger algunos glaciares.   

"Sabemos desde hace algún tiempo que el océano alrededor de la Antártida se está calentando rápidamente, y que esto representa una amenaza significativa para los glaciares y la capa de hielo, con consecuencias para el aumento del nivel del mar a nivel mundial. Lo que muestra esta nueva investigación es que los glaciares aparentemente estables pueden cambiar muy rápidamente, volviéndose inestables casi sin previo aviso, y luego adelgazando y retrocediendo con mucha fuerza", explicó Michael Meredith, profesor del British Antártida Survey y uno de los autores del artículo.

En el artículo, los investigadores aseguran que lo sucedido con el glaciar Cadman puede verse como un ejemplo de un "punto de inflexión glaciológico", donde un sistema en estado estable puede un camino u otro en función de un cambio en un parámetro ambiental.

En el caso del glaciar Cadman, la llegada de agua cálida al océano en 2018 provocó que aumentara su descarga de hielo al mar en un 28% en 13 meses. Y los investigadores consideran que otros glaciares de la Península Antártica pueden ser vulnerables a cambios repentinos similares debido a la geología submarina.