El día que comienza el juicio de Daniel Sancho en Tailandia, HBO Max ha estrenado una polémica entrevista con su padre, Rodolfo Sancho. El episodio cero de la serie documental titulada El caso Sancho se ha estrenado con una advertencia: ni se responsabilizan de las opiniones vertidas ni continuarán emitiendo hasta que termine el proceso legal. Pero las primeras palabras del actor español, protagonista de Isabel, eran un tesoro muy bien guardado que no podía dejarse para más adelante.

Rodolfo Sancho es el protagonista absoluto de este episodio cero. Pese a que el objetivo es narrar el caso de Daniel, es su padre quien se lleva el protagonismo en los primeros minutos. Momentos angustiosos grabados en el aeropuerto, con la presión de los medios de comunicación y la tensión en el rostro del actor, marcan el tono del documental.

El póster del episodio cero para 'El caso Sancho', en donde habla Rodolfo Sancho.
El póster del episodio cero para 'El caso Sancho', en donde habla Rodolfo Sancho.

Una intención clara de controlar el discurso

Su discurso empieza y se mantiene siempre en un constante trabajo de reafirmación personal: "Intento estar estable. Intento no tener ni grandes bajones ni grandes subidones porque una cosa lleva a la otra. Creo que esta estabilidad mía me ha ayudado". Sigue diciendo: "Reacciono bastante rápido". E insiste: "Yo sabía lo que tenía que hacer desde el principio".

Una postura que confirma aquellas primeras palabras suyas desde Tailandia cuando dijo "no van a sacar lágrimas de mí" y sobre la que también se pronuncia. "Hay que sacarle punta a todo", dice Rodolfo Sancho cuando le preguntan al respecto. "Hubo gente a la que a lo mejor no le gustó esa frase, no le doy más recorrido al asunto porque no lo tiene", señala.

Rodolfo Sancho reivindica sus sentimientos, que considera "lo más privado". Pero deja claro que ha sufrido, que se ha "entristecido en momentos" y que la situación "no es la mejor del mundo", aunque "las hay peores". Es entonces cuando admite que durante el proceso ha "bloqueado" emociones y ha querido controlar lo que estaba pasando. "Soy un padre luchando por su hijo", ha reiterado en varias ocasiones durante la entrevista. "Es el gran motor para no caer en una depresión", ha admitido.

"Yo llevo toda mi vida preparándome para esto", ha dicho Rodolfo Sancho, confesando que tienen la esperanza de poder evitar la cadena perpetua para Daniel. "Estar aterrorizado por lo que puede o no ocurrir intento que no me atrape eso, aunque no es fácil", confiesa.

Rodolfo Sancho, en una imagen del aeropuerto.
Rodolfo Sancho, en una imagen del aeropuerto.

Rodolfo Sancho reconstruye los primeros momentos

Según cuenta Rodolfo Sancho, fue su hermano quien le dio noticia de lo que estaba pasando aquel 5 de agosto. Le llamó y empezó a contárselo, con cierta timidez y reparo, sin darle demasiados detalles: "Yo le tengo que preguntar '¿bueno, pero está vivo?'", comenta el actor. Mi primera reacción es estupefacción y no creerme a pies juntillas lo que están contando porque no cuadraba nada, todo era muy extraño".

Al día siguiente consigue hablar con su hijo, "cosa absolutamente estrambótica" porque le dejaban tener el teléfono, dice el actor de El Ministerio del Tiempo. "En la conversación con Daniel me dice que este tipo le había amenazado de muerte", comenta. "Nos cuenta cómo fue: la pelea, lo posterior a la pelea, el miedo, el pánico, el estado de disociación... todo eso", insiste.

Además, Rodolfo ha querido defender que su hijo de 29 años está en una "edad influenciable", sobre todo cuando "estás intentando que tus negocios, o lo que sea, cuajen". Ha recordado que antes de que Daniel Sancho viajara a Tailandia había estado con ellos en las islas Canarias, donde habían pasado unos días muy buenos. Sin embargo, durante esas vacaciones no le contó nada de Edwin Arrieta. Alega que un hijo no lo comparte todo con su padre, sobre todo porque probablemente pensó que podría "solucionar sus problemas solo".