"Todos los bolivianos somos parte de esto, ha sido la protesta pacífica más grande de la historia del país y la recuperación de la democracia más grande de la historia del país". Es el dictamen de Luis Fernando Camacho, más conocido como el macho Camacho, el líder ultraderechista y ultrarreligioso que está detrás del fin de los casi 14 años de mandato del ya ex presidente Evo Morales.

Luis Fernando Camacho, de 40 años, apenas era conocido en Bolivia más allá de Santa Cruz de la Sierra hace unos meses. No se presentó a las elecciones del 20 de octubre, pero alentó un paro cívico para denunciar el fraude electoral cometido por Evo Morales al adjudicarse la victoria por cuarta vez consecutiva en las presidenciales del 20 de octubre.

Es presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz, que ejerce como el gobierno en la sombra de los cruceños. Los comités cívicos agrupan en Bolivia a empresarios, gremios y representantes vecinales.

Evo Morales está en México desde el lunes por la tarde. Su periplo para llegar de la Cochabamba boliviana a la capital federal fue muy ilustrativo de cómo está América Latina en la actualidad. Lo dijo el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, cuando el avión que llevaba a Morales pudo aterrizar por fin en México. Perú les había negado permiso para hacer escala, de modo que pararon en Paraguay, y Ecuador también prohibió que cruzaran su espacio aéreo.

Desde la capital federal, Evo Morales ha denunciado ser víctima de un golpe cívico militar. Considera que Jeanine Áñez se ha autoproclamado presidenta. Los diputados del Movimiento al Socialismo se han ausentado en la votación de la Asamblea.

Camacho dice que no hace política. Es decir, es otro de los dirigentes de la llamada antipolítica. Poco antes de que se anunciara la renuncia de Evo Morales, el domingo por la noche en España, se presentó ante el Palacio de Gobierno de La Paz con una Biblia para entregar una carta en la que pedía al líder indígena que dejara el poder. Le acompañaron miles de personas.

Biblia y Patria

"La Biblia volverá al Palacio de Gobierno", ha repetido mientras mantenía el paro en las calles. Y ha vuelto. La presidente interina, la opositora Jeanine Áñez, antes vicepresidenta segunda del Senado, ha asumido el poder portando una gran Biblia. Camacho ha pedido a Áñez que anule los juicios a presos y perseguidos políticos. "No podemos seguir con esa espada de Damocles", ha remarcado, según informa el boliviano Página Siete.

Sus constantes alusiones a Dios han hecho que muchos medios en Bolivia y en Latinoamérica le comparen con el presidente brasileño, Jair Bolsonaro. Dios y patria son sus referentes. Suele portar una biblia y una bandera boliviana cuando comparece ante sus seguidores cruceños.

Con los rivales políticos sacaría la agenda, como lo hacía Pablo Escobar, pero solo para anotar los nombres de los traicioneros de este pueblo, porque queremos que el día de mañana vayan presos, no por rencor y odio, sino por justicia", dice Camacho

Su retórica oscila entre los llamados al todopoderoso con un mensaje muy divisivo. Sobre el trato que daría a sus rivales políticos, dijo en una ocasión que le gustaría evocar a Pablo Escobar, el narcotraficante. "Sacaría la agenda, como lo hacía Pablo Escobar, pero solo para anotar los nombres de los traicioneros de este pueblo, porque queremos que el día de mañana vayan presos, pero no por rencor y odio, sino por justicia".

Mientras el opositor Carlos Mesa, reclamaba una segunda vuelta electoral, el macho Camacho fue más allá y exigió la renuncia de Evo Morales. Su órdago contó con el aval del informe de la OEA que confirmaba que se había cometido fraude en el recuento. La policía dio de lado a Morales y también las Fuerzas Armadas.

El secretario general de la OEA, Luis Almagro, ha sido tajante al denunciar cómo el golpe de estado se dio en Bolivia al manipular el recuento electoral, no al forzar la renuncia de Morales.

Cruceño de familia de empresarios

Luis Fernando Camacho forma parte de una familia de empresarios cruceños con inversiones en seguros, gas, inmobiliarias en la región más rica del país. Tiene un máster en derecho financiero por la Universidad de Barcelona.

Comenzó su actividad pública en la Unión Civil Cruceñista, un grupo que la Federación Internacional de Derechos Humanos considera paramilitar y racista. Es miembro de los Caballeros del Oriente, una de las logias más arraigadas en Santa Cruz de la Sierra y bastión de la ultraderecha, según informa Clarín.

Su salto a la política nacional ha sido vertiginoso. En Santa Cruz hay una rivalidad histórica con los paceños (La Paz, la capital). El comité cívico que encabeza Camacho ha sido muy fiero en sus críticas contra Evo Morales.

Sostiene Luis Fernando Camacho que Evo Morales es responsable de que Dios haya salido del gobierno de Bolivia. Asegura que va a volver a sus negocios, que su misión es de otro mundo. "No tumbamos gobiernos, liberamos a un pueblo en fe".