Este sábado las calles de la capital de Austria se llenaban de personas para protestar contra las nuevas medidas sanitarias impuestas por el gobierno local para intentar frenar el avance de la pandemia del coronavirus en el país.

Entre las medidas establecidas se encuentra el confinamiento a nivel nacional y la obligatoriedad de vacunarse contra la COVID-19, medida que entrará en vigor a partir de febrero del año que viene. El confinamiento entrará en vigor el lunes y finalizará, para todos los que estén vacunados o hayan pasado la enfermedad, el próximo 13 de diciembre.

Los aproximadamente 7.000 manifestantes, según estima la Policía, han exigido una mayor libertad y no se descarta que se realicen mas marchas, convocadas en gran medida por la formación de extrema derecha Partido de la Libertad. Su líder, Herbert Kickl, que actualmente se encuentra enfermo de COVID-19, ve las medidas como algo "dictatorial".

Desde el cuerpo de Policía aseguran que "no se han producido incidentes dignos de ser mencionados" y han calificado la situación de "dinámica", aunque desde el gobierno se espera que más personas se sumen a lo largo del día.

En la jornada de hoy el país ha registrado 15.297 contagios y la incidencia semanal rebasa ya los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes. 42 personas han fallecido en las últimas 24 horas y actualmente hay 2.881 personas en tratamiento hospitalario por coronavirus, 524 de ellas en unidades de cuidados intensivos. El número total de contagios en el país desde el inicio de la pandemia ronda los 1.030.000.