El pasado domingo las Fuerzas Aéreas de Israel publicaron un comunicado en la red social X -anteriormente conocida como Twitter- donde informaron de que habían utilizado por primera una nueva arma. Se trata del llamado 'Steel Sting' (que en español podría traducirse como 'Picadura o Aguijón de Acero'), un mortero que llevan desarrollando más de una década y que ahora han puesto a prueba en Gaza.

"La unidad Manglán, en cooperación con la Fuerza Aérea, frustró a decenas de terroristas utilizando una gran variedad de armas, incluida una innovadora y precisa bomba de mortero, llamada 'Steel Sting'", rezaba el comunicado difundido por el Ejército hebreo, que incluía también un vídeo donde se veía el momento en el que se utilizó por primera vez. La Manglán, que toma su nombre y emblema de un pelícano, es una unidad de élite que opera detrás de las líneas enemigas y en lo profundo del territorio enemigo utilizando tecnologías y armamento avanzados.

El 'Aguijón de Acero' es un mortero de 120 mm que emplea un láser y un sistema GPS para atacar objetivos con precisión y evitar daños colaterales y lesiones de civiles. Está diseñado para utilizarse tanto en terrenos abiertos como en entornos urbanos como Gaza. Y promete "revolucionar" la guerra terrestre, otorgando a los batallones israelíes una potencia de fuego "orgánica, precisa y eficaz".

Así lo explicó en marzo de 2021 Elbit Systems, la empresa desarrolladora del arma, que hizo un comunicado conjunto con el Ministerio de Defensa y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) para presentarla oficialmente. En ese momento el 'Aguijón de Acero' había pasado las pruebas finales en el sur de Israel y acababa de pasar a fase de producción, antes de poder ser suministrada al Ejército.

En esos test el mortero se empleó utilizando un sistema CARDOM, que permite instalar el arma en diversos vehículos. El Ejército israelí lo puso a prueba en un APC M113, un vehículo blindado de transporte de personal estadounidense, y en un SUV Hummer 4x4.

Una guerra urbana

 "La tecnología puesta a disposición de las FDI por las industrias israelíes cambia el campo de batalla y proporciona a nuestras fuerzas medios más precisos y eficaces. El 'Aguijón de Acero' satisface las necesidades de las FDI, adaptando las capacidades de combate para enfrentarse a enemigos ocultos en entornos civiles y urbanos, al mismo tiempo que cumple con los estándares legales y morales establecidos por el Estado de Israel", declaró el por entonces Ministro de Defensa, Benny Gantz.

El mortero abre un nuevo abanico de posibilidades para Israel en Gaza, un entorno urbano y atestado de escombros, donde los expertos dudan de que algunas de sus principales armas sean eficaces. Como sus poderosos tanques, considerados "casi indestructibles" por el Ejército hebreo, pero que quizás podrían ser demasiado grandes y pesados.

Además, la Franja es una de las zonas más densamente pobladas del planeta (unas 2,3 millones de personas viven allí). Y la mayoría de la población civil nada tienen que ver con los ataques terroristas perpetrados por Hamás, cuyos soldados representan menos del 1% de la población. A lo largo de los años, Israel ha sido acusado de utilizar una fuerza desproporcionada en sus intervenciones militares, lo que se traducía en un número elevado de víctimas civiles. Algo que, con el 'Aguijón de Acero', el Estado hebreo pretender cambiar.

"Diez años de investigación y desarrollo nos han llevado a este momento, en el que podemos proporcionar a las fuerzas terrestres de las FDI capacidades avanzadas diseñadas para el campo de batalla moderno. Esta munición de mortero guiada por láser y GPS proporciona a las tropas una capacidad de disparo precisa que hasta ahora sólo se ha implementado en misiles y municiones aéreas. Se trata de un programa muy complejo y un sistema innovador a nivel internacional", aseguró en 2021 Yaniv Rotem, Jefe de Investigación y Desarrollo de la DDR&D del Ministerio de Defensa de Israel.