Jueves 7 de septiembre, el Parlamento de Cataluña ha aprobado la ley del referéndum de autodeterminación y la ley de transitoriedad jurídica. La opinión pública y la sociedad están en plena ebullición. Los independentistas han tomado las calles de las principales ciudades catalanas para celebrar los hechos y alentar sus aspiraciones.

El presidente Mariano, ha convocado un Consejo de Ministros de urgencia. Sobre la mesa, la decisión, o no, de aplicar el artículo 155 de la Constitución.

—Señoras y señores, los independentistas han aprobado las dos leyes que son claramente ilegales. Debemos tomar la decisión de, o bien recurrirlas al Tribunal Constitucional o activar el procedimiento de puesta en marcha del 155. —informa Mariano a los presentes.

—La situación es insostenible. La población espera una medida contundente. Debemos preservar la Ley. —afirma Juan Ignacio.

—No perdamos los nervios. Hasta ahora hemos tenido éxito recurriendo al Constitucional. Además, Millo está haciendo progresos. —apunta Soraya.

—¿Progresos? Hemos perdido mucho tiempo, y el Constitucional ya está cansado. Es probable que se decante por enviar la patata caliente a la fiscalía, es decir, al Gobierno, y habremos perdido un tiempo precioso. —señala Rafael.

—Nuestro partido en Cataluña clama porque actuemos de forma contundente. Xavier y Alicia piden la aplicación del 155 de forma inmediata. —añade Cristóbal.

—¿Qué dicen el PSOE y Cs? — susurra Luis.

—Ayer mismo me confirmaron que apoyarán lo que proponga el Gobierno. Pero ya sabéis que no son muy de fiar. —responde María Dolores.

—Propongo que se aplique el 155. ¿Quién está en contra? —pregunta Mariano.

Un silencio atronador se apodera de la sala.

—No se hable más. Soraya, habla con Pío. Dile que vaya preparando el procedimiento del 155 en el Senado. Íñigo, informa a las agencias, daré una rueda de prensa en una hora y enviaré el requerimiento al presidente de la Generalitat hoy mismo. —ordena Mariano.

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Viernes 8 de septiembre. Un bedel pide permiso para entrar al despacho de Carles, que en ese momento se encuentra con Oriol. El bedel les hace entrega de un sobre. En su interior se encuentra el requerimiento del Gobierno español en el que se le insta a cumplir sus obligaciones legales.

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—Ya ha llegado el requerimiento, tal como preveíamos. —dice Carles.

—Ya sabes lo que hay que hacer. Dado que no está desarrollado el procedimiento ni reglamentado el plazo para contestar al mismo, lo depositas con cuidado en la papelera. A la prensa le decimos que nosotros cumplimos la ley y el mandato del pueblo de Cataluña y listo. —apunta Oriol.

—Eso es. Todo está saliendo según el plan. —añade Carles.

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Viernes 15 de septiembre. Día de Consejo de Ministros. En Moncloa no se ha recibido respuesta al requerimiento.

—No hemos tenido noticias de la Generalitat. —informa Mariano algo nervioso.

—¿Debemos tomarlo cómo que no ha sido atendido el requerimiento? —pregunta Soraya.

—Sin duda. —afirma Rafael.

—En ese caso, enviaremos al Senado el escrito con el contenido y alcance de las medidas a adoptar. —apunta Mariano.

—Antes hay que enviar la justificación de haber enviado el requerimiento y la del incumplimiento. ¿Cómo vamos a justificar el incumplimiento? —susurra Luis.

—Con el informe de la abogacía del estado. —responde Rafael.

—Y… ¿cuáles van a ser las medidas a adoptar? —vuelve a susurrar Luis.

—¡Aquí están! —señala Cristóbal. Mi equipo ya las ha preparado y garantizarán los servicios…

—Perdón. Tengo una duda. —interrumpe Fátima.

—Por favor, Fátima, continua. —añade Mariano.

—Gracias presidente. El 155 dice que “las medidas serán para obligar a la Generalitat al cumplimento forzoso de las obligaciones y las leyes, y que el Gobierno podrá dar instrucciones a las autoridades de la Generalitat”.

—Eso es. —apunta Juan Ignacio.

—Pues bien, ¿Cómo vamos a obligar a cumplir la ley a aquellos que no la quieren cumplir?  ¿Qué haremos si las autoridades se niegan a cumplir las medidas si el 155 no prevé la suspensión de funciones? Podríamos estar cometiendo un acto inconstitucional. ¿No sería mejor aplicar el Código Penal y pedir su procesamiento por delitos de sedición tal como sugieren en la fiscalía? —concluye Fátima con la voz tenue.

—Soraya. Da instrucciones a Pío para que vaya convocando la Comisión de las Comunidades Autónomas para que dé acuse de recibo de nuestro escrito y para que vaya convocando al presidente de la Generalitat para las alegaciones no más tarde de siete días. —concluye Mariano.

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Lunes 18 de septiembre. El bedel entra en el despacho de Carles. Le hace entrega del requerimiento para que en el plazo de una semana se persone ante la Comisión del Senado para presentar alegaciones sobre la acusación del Gobierno sobre su comportamiento contrario a la ley.

—Oriol, esta vez te voy a ceder a ti el honor de depositar la citación con todo cuidado en la papelera. —comenta Carles.

—Muchas gracias Carles. Eres muy amable. Todo está saliendo según el plan. —añade Oriol.

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Martes 26 de septiembre. El presidente del Senado acude a reunirse con Mariano a Moncloa.

—El presidente de la Generalitat no ha contestado al requerimiento ni se ha personado. —informa Pío.

—Bien. ¿Cuándo emite la Comisión la propuesta razonada para llevarla al Pleno? —pregunta Mariano.

—Mañana, y el Pleno se celebrará el 28. No habrá modificaciones al escrito del Gobierno para agilizar el proceso —apunta Pío.

—Muy bien. Muchas gracias. Nos vemos en el Pleno. Debemos aprobar las medidas antes del día 1—finaliza Mariano.

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Jueves 28 de septiembre. El Pleno del Senado debate la propuesta de la Comisión que contiene las medidas propuestas por el Gobierno para obligar a la Generalitat de Cataluña a cumplir con sus obligaciones con la seguridad de que será aprobada dado que el partido del Gobierno tiene mayoría absoluta. La propuesta es aprobada.

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Viernes 29 de septiembre. El Gobierno envía la relación de medidas aprobadas en el Senado ordenando a las autoridades de la Generalitat de Cataluña que las cumplan inmediatamente. Nuevamente, nuestro amigo bedel vuelve a entrar en el despacho de Carles para entregarle la orden, ya que es la máxima autoridad de la comunidad autónoma.

—Oriol. ¿Qué te parece si hoy, en lugar de depositar esta orden con cuidado en la papelera, hacemos un avión de papel con ella y la lanzamos por la ventana a Moncloa a ver si les llega de vuelta?

—Como quieras Carles. Todo está saliendo según el plan

Sábado 1 de octubre. Continuará…