Pablo Iglesias se fue a la fiesta del PCE, de la que nadie se acuerda ya, ni los punkis, y Errejón se fue al aniversario de UGT, a sentarse detrás de Carmen Calvo como detrás de la tata. Resulta que después de tanta nueva política, del podemismo, del carmenismo, de la revolución transversal o boscajosa del pueblo redescubierto, en la izquierda sigue habiendo lo mismo: el comunista y el socialista. El comunista con el viejo contrachapado de sus varios comunismos (siempre fueron muchos, y cada uno con un maestro de obra para el mismo libro y el mismo martillo) y el socialista con su pana esponjada como un cobertizo y su capitalismo para pasantes y para pobres, al que llamaban socialdemocracia o progresismo. O sea, el que se va a la fiesta del PCE, a hacer la revolución con el mechero de abridor y algún grupo macarra o enjaezado de calaveras, y el que se va a la barbacoa de liberados y maestritos a aliñar la hamburguesa y el mercantilismo con marihuana.
Para seguir leyendo Regístrate GRATIS
Identifícate o Regístrate con:
Todas las claves de la actualidad y últimas horas, en el canal de WhatsApp de El Independiente. Únete a nuestro canal de Whatsapp en este enlace.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Israel informa a España de las represalias por el reconocimiento de Palestina: "Se acabaron los días de la Inquisición"
- 2 El Pacma expresa su "descontento" con Rüdiger tras ir a los toros
- 3 Los militares en el Líbano, en vilo tras las palabras de Robles
- 4 ¿Qué significa reconocer las fronteras de Palestina de 1967?
- 5 El Papa pide a los obispos italianos que impidan entrar a homosexuales a los seminarios: "Hay demasiado ambiente maricón"
- 6 Másorange estudia demandar al nuevo CEO de Vodafone
- 7 ¿Dónde puede hacer daño Israel? España le vendió productos por 1.900 millones en 2023
- 8 Oliu manda una carta a sus accionistas: "Infravalora el proyecto"
- 9 Los programas espías, el problema real de la crisis con Israel