Los 17 miembros críticos de la Comisión Ejecutiva del PSOE, que junto a las vacantes no cubiertas desde su constitución representan la mayoría absoluta dentro de este órgano, han presentado este miércoles su dimisión, con la que intentan forzar la caída del secretario general, Pedro Sánchez, según ha confirmado Ferraz.
Los encargados de entregar las firmas en la sede del partido han sido el sevillano Antonio Pradas, actual secretario de Política Federal del PSOE, y la madrileña Eva Matarín.
Escrito de dimisión de los 17 críticos.
Los 17 dimitidos son:
- Antonio Pradas (Andalucía)
- Micaela Navarro (Andalucía)
- Emiliano García-Page (Castilla - La Mancha)
- Ximo Puig (Comunidad Valenciana)
- Luz Rodríguez (Castilla - La Mancha)
- Juan Pablo Durán (Andalucía)
- Carme Chacón (Cataluña)
- Eva Matarín (Madrid)
- Tomás Gómez (Madrid)
- Estafanía Martín Palop (Andalucía)
- Noemí Cruz (Andalucía)
- José Miguel Pérez (Canarias)
- Carlos Pérez (Aragón)
- María Ascensión Murillo (Extremadura)
- Francisco Pizarro (Andalucía)
- Manuela Galiano (Castilla - LaMancha)
- María José Sánchez Rubio (Andalucía)
Reacciones en el resto de partidos
Los líderes del resto de partidos se han apresurado a valorar este movimiento interno en las filas socialistas. El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha sido el primero en acudir a las redes para calificar el movimiento de la Ejecutiva como "un fraude".
Tengo muchas diferencias con Sánchez pero pretender hacer caer a un secretario general, elegido por las bases, con dimisiones es un fraude
— Pablo Iglesias (@Pablo_Iglesias_) September 28, 2016
Albert Rivera, sin embargo, ha valorado la noticia positivamente, con la mente puesta en las repercusiones que podría tener de cara al desbloqueo de una hipotética investidura de Mariano Rajoy:
No me alegra ver a un partido constitucionalista en crisis,pero peor sería que toda España continuara en crisis por el bloqueo institucional
— Albert Rivera (@Albert_Rivera) September 28, 2016
Alberto Garzón, por su parte, apuntaba directamente hacia la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, como ideóloga del movimiento destinado a hacer caer al secretario general, Pedro Sánchez:
Ayer un periodista me resumía todo este cacao del siguiente modo: «Susana Díaz nunca gana, siempre hereda». Y hace por heredar, añado yo.
— Alberto Garzón🔻 (@agarzon) September 28, 2016
Guerra anunciada
Fuentes del PSOE ya habían reaccionado esta mañana tras la intervención de Felipe González en la Cadena SER, valorando que las palabras del ex presidente eran "un golpe de mano y una revuelta palaciega contra los militantes y el partido". Ante el aluvión de comentarios entre sus compañeros, estas fuentes negaban que Sánchez fuese tirar la toalla e insistían en que "habrá Comité Federal". "Si la Ejecutiva hubiera tenido mayoría para forzar la dimisión de Sánchez, ya lo hubiera hecho. No hubiera tenido que recurrir a Felipe González", agregaban.
El secretario general del PSOE también ha respondido a las distintas declaraciones en una entrevista concedida a eldiario.es: "Respeto las opiniones de Felipe González, pero las decisiones las tomo yo en primera persona, que soy el secretario general", ha afirmado.
El PSOE vive un debate interno debido a las diferentes posturas que debe tomar el partido respecto a una investidura de Mariano Rajoy. Sánchez dejó claro ayer que no es partidario de una abstención que favorezca la investidura de Rajoy y hoy el ex presidente socialista, por su parte, ha opinado que es mejor abstenerse que ir a unas terceras elecciones. Ante estas declaraciones, Sánchez ha pedido abiertamente conocer la postura de la presidenta de la Junta de Andalucía: "Felipe González está en el bando de la abstención. Me gustaría saber en cuál está Susana Díaz", ha expresado, añadiendo: "Es momento de que nos digamos las verdades y que lo hagamos en un congreso".