Mariano Rajoy ha aceptado el encargo del Rey para ir a la investidura, que arranca mañana en el Congreso, y lo ha hecho "por coherencia" y para acabar con un periodo de "interinidad política" que ha durado más de 300 días. Durante una comparecencia en Moncloa, el presidente del ejecutivo en funciones ya por poco tiempo, ha puesto en valor que se haya evitado unas terceras elecciones y que, además, su voluntad y su "obligación", es intentar que la legislatura dure cuatro años, y no apenas unos meses como han especulado algunos de sus ministros, en concreto, el de Exteriores, José Manuel García Margallo.

En los próximos días se pondrá en contacto con Javier Fernández "para ver cómo podemos gobernar"

Sin querer adelantar nada de la composición de su futuro gobierno, que asegura no tener pensado, ha admitido las "grandes dificultades" de un Ejecutivo en minoría y que, a pesar de ello, su partido no ha caído "en tácticas ventajistas", posiblemente en alusión a los réditos electorales que podría haber conseguido el PP en una nueva consulta aprovechando la situación de debilidad extrema en que se encuentra el PSOE.

Tras afrontar este reto "sin demoras ni recelos", anuncia un gabinete ministerial "capaz, estable y duradero" frente a una oposición a la que reclama "diálogo, entendimiento y cooperación", todo ello, conjugando "responsabilidad y compromiso".

Rajoy, que basará los ejes de su discurso de mañana en el Congreso sobre las mismas bases que el que pronunció a finales de agosto, esto es, los 150 puntos del pacto con Ciudadanos más los ejes de su programa electoral, ha dicho estar dispuesto a abordar reformas que afecten a la Lomce, a las pensiones o a la financiación autonómica. Ha insistido en que "algunas propuestas del PSOE me parecen sensatas y se puede hablar porque en muchas cosas coincidimos". De hecho, su intención es ponerse en contacto "en las próximas fechas" con el presidente de la comisión gestora socialista, Javier Fernández, "para ver cómo podemos gobernar".

Esta mañana sí ha hablado con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, para renovar la salud del acuerdo que, junto a Coalición Canaria, le aseguran 170 votos a favor en la investidura, que arranca mañana a media tarde contra la que era la intención inicial de Moncloa de comenzar el jueves para que la segunda votación tuviera lugar el domingo con el Rey de vuelta en España de su viaje a Cartagena de Indias.