El Comité contra la Tortura del Consejo de Europa (CPT) ha criticado en un informe publicado este jueves la forma en que España deporta a inmigrantes irregulares por vía aérea, especialmente por la falta de antelación con la que se les informa del traslado a sus países de origen y la inexistencia de exámenes médicos previos. Las autoridades españolas han tomado nota y reconocen la necesidad de implantar estas recomendaciones.

El informe del CPT recoge las conclusiones de las evidencias obtenidas tras analizar el vuelo de retorno que partió desde Madrid a Bogotá (Colombia) y Santo Domingo (República Dominicana) el pasado 18 de febrero y que estuvo coordinado por la Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras (Frontex).

En concreto, la institución europea centra los reproches a España en dos aspectos. Por un lado, que informe a los detenidos sobre su traslado el mismo día del viaje, por lo que propone a las autoridades nacionales que proporcione información por escrito a los extranjeros varios días antes del vuelo a fin de que aquéllos puedan entrar en contacto con un abogado antes de su repatriación.

El organismo europeo reprocha que no se hagan revisiones médicas antes de las repatriaciones

En segundo lugar, el comité también considera necesario que los extranjeros expulsados sean sometidos previamente a una revisión médica para evitar situaciones comprometidas en el viaje, como ocurrió durante el citado vuelo desde Madrid a Bogotá y Santo Domingo. No sólo formula también esta recomendación, también la conveniencia de que el personal de escolta sea instruido sobre aspectos psicológicos.

Por contra, el CPT pone de manifiesto que no recibió denuncias por malos tratos relacionadas con este traslado y que los escoltas se mostraron en todo momento sensibles con las necesidades que plantearon los inmigrantes durante el viaje.

Además de analizar la actuación de España en esta materia, el informe del Comité contra la Tortura del Consejo de Europa hace también referencia al comportamiento de las autoridades italianas, tomando como muestra la conducta observada en un vuelo de Roma a Lagos (Nigeria) el 17 de diciembre de 2015. Las conclusiones son algo más severas.

Solicitudes de asilo

Así, además de hacer constar los mismos reproches, el CPT llama la atención sobre la anomalía que supone que Italia consumara la expulsión de inmigrantes irregulares sin que hubiera resuelto solicitudes de asilo presentadas por aquéllos. Lejos de disentir, el país transalpino se ha comprometido a aprobar reformas legislativas que le permitan reducir el plazo de tramitación de las peticiones. También juzga necesaria la incorporación de más escoltas.

El Consejo de Europa también muestra su falta de convencimiento de que el reglamento de la Unión Europea ofrezca un riguroso mecanismo de reclamaciones que garantice de manera efectiva las quejas que eventualmente pudieran registrarse.