Jugaron un papel clave en la lucha contra ETA desde Francia. Lo hicieron como juezas y supieron no sólo reconducir, sino engrasar e incrementar la colaboración hispano francesa en la lucha contra el terrorismo. El próximo lunes el Gobierno español reconocerá su labor de años de colaboración con las autoridades judiciales y policiales españolas para terminar con el terrorismo y, sobre todo, con el santuario en el que durante muchos años se convirtió el país vecino. La magistrada Laurence Le Vert y la jueza Helène Davo recibirán de manos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la encomienda de Isabel la Católica en el acto que por la tarde acogerá el Palacio de La Moncloa y al que está previsto que asista el primer ministro galo, Edouard Phillippe.

El reconocimiento a Le Vert y Davo se llevará a cabo dentro del evento con el que España y Francia quieren escenificar el final de ETA con la entrega de material incautado a la banda en Francia y que en realidad ya se formalizó el pasado mes de febrero. El reconocimiento de la Orden de Isabel La Católica la instituyó Fernando VII en 1815. Premia “comportamientos extraordinarios de carácter civil” realizados por ciudadanos españoles o extranjeros que han “redundado en beneficio” de España-.

Serán reconocidas con la Encomienda de Isabel la Católica por su aportación "extraordinaria" en la lucha contra ETA

Bajo la denominación de ‘Acto de cooperación hispano francesa en la lucha contra ETA’ el Gobierno francés certificará la entrega a las autoridades españolas de un material valioso que la Justicia gala conservaba y que reúne cerca de dos décadas de operaciones, incautaciones y acciones contra la banda terrorista. Con él –la entrega del material reunió cerca de 300 cajas de documentación y armas- se espera que se pueda contribuir al esclarecimiento de algunos de los cientos de atentados sin resolver.

Organización confusa

El acto, al que está previsto que asistan las principales asociaciones de víctimas, ha sufrido modificaciones en los últimos meses y aún hoy, algunos de los asistentes no han recibido invitación formal o desconocen los detalles del mismo.

La cumbre ya se contempló celebrar por el anterior Gobierno del PP. El ministerio del Interior de Juan Ignacio Zoido anunció su celebración sin que finalmente se concretara. Ahora, una vez disuelta la banda terrorista, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha retomado la idea de reunir a algunas de las personas más significativas en la lucha contra ETA en Francia para rendirles un reconocimiento por su colaboración.

En un primer momento se contempló la posibilidad de que se celebrará en el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo que el Gobierno construye en Vitoria -y que continúa en obras- y en el que se depositará el material entregado por Francia. Incluso desde la consejería de Seguridad del Gobierno vasco se pusieron en contacto con el Centro en aras a planificar el posible operativo de seguridad.

El acto estará presidido por Pedro Sánchez y el primer ministro francés, Edouard Phillippe

La falta de información en torno a los detalles de este acto se ha mantenido hasta ahora y ha suscitado cierta confusión tanto entre algunas asociaciones de víctimas, a algunas de las cuales se les invitó ayer -vía correo electrónico- a sólo cuatro días del evento, como entidades que estaban llamadas a participar en él. Incluso desde el Gobierno vasco se ha reconocido que la invitación al lehendakari Iñigo Urkullu se ha producido hoy.

El Ejecutivo vasco había anunciado esta mañana que le era imposible modificar la agenda que ya tenía comprometida y no participaría en el acto. Finalmente, el Gobierno ha comunicado por la tarde que tras la disculpa de Moncloa por la premura de la invitación se ha modificado la agenda de Urkullu para facilitar su presencia en Madrid el lunes por la tarde.

Se llegó a contemplar la posibilidad de que el lugar elegido para escenificar este final de ETA fuese San Sebastián o Bilbao. A última hora, se ha optado por el Palacio de La Moncloa, donde se celebrará a partir del a 16.30 horas del próximo lunes 1 de octubre.

En el acto también se homenajeará a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. En él está prevista la emisión de un vídeo resumiendo su labor en la lucha contra ETA. Está prevista la intervención tanto de Sánchez como del primer ministro Phillippe.

Juezas reconocidas

No será el primer reconocimiento que reciben las dos magistradas francesas. La jueza Laurent Le Vert (Neully, 1951) fue durante muchos años el azote judicial contra ETA en Francia. En 1986 se hizo cargo como juez instructora de la sección antiterrorista. Desde allí fomentó la colaboración con la Justicia española de modo intenso. Su papel la situó como objetivo de ETA, que intentó atentar contra ella. Desde 2008 es vicepresidenta de instrucción del Tribunal Superior de París. En el año 1993 recibió la Gran Cruz de la Orden de Raimundo de Peñafort.

Este mismo reconocimiento fue concedido por el gobierno de Mariano Rajoy a Helène Davo. Además, la que fuera durante más de cuatro años jueza de enlace de Francia en España ha sido reconocida por la Guardia Civil y asociaciones de víctimas. Actualmente Davo ejerce como responsable, entre otras cuestiones, de la política penitenciaria que se aplica a los presos de ETA en Francia. Ha sido ella la que ha mantenido contactos con las asociaciones de víctimas en nuestro país para comunicarles los términos del cambio de la política de dispersión que Francia acordó poner en marcha para acercar a algunos reclusos de ETA a cárceles cercanas al País Vasco.