El BBVA, con Francisco González a la cabeza, investigó a Juan Carlos I por su posible implicación en la ofensiva que el PSOE y Sacyr lanzaron en noviembre de 2004 para hacerse con el control del banco. El espionaje del monarca también corrió a cargo del comisario Villajero y se realizó porque desde la entidad bancaria tenían la sospecha de que Juan Carlos podría haber tenido un papel fundamental en esta jugada.

Así lo desvela el portal Moncloa.com, que ha tenido acceso a los documentos de la ya llamada operación Trampa que investiga el espionaje ordenado por FG para desactivar la entrada de la constructora en el consejo de administración de BBVA. Según este informe, Villarejo habría incluido al Rey emérito como uno de los personajes principales y lo mencionó en varios documentos secretos que entregaría posteriormente a FG.

El pasado 15 de enero, Manos Límpias presentó  una denuncia ante el juez de la Audiencia Nacional que instruye el caso Villarejo para que investigue al comisario hoy en prisión preventiva y al ex presidente del BBVA Francisco González como autores de un delito de organización criminal por confabularse para investigar “ilícitamente” a “competidores y rivales profesionales”.