El Clásico entre el Fútbol Club Barcelona y el Real Madrid se ha disputado finalmente, pero no con normalidad. El Barcelona ha permitido el acceso de dos pancartas gigantes con los lemas "Libertad" y "Spain, sit and talk", promovidos por el Tsunami Democràtic, que ha llegado a interrumpir el juego en el minuto 10 de la segunda parte tras lanzar balones amarillos al campo.

Sin embargo, el bloqueo absoluto del partido no ha estado cerca de producirse y los equipos han llegado al estadio sin inconvenientes.

Más conflictiva ha sido la salida, que ha coincidido con graves enfrentamientos entre los Mossos d'Esquadra y los radicales independentistas, que han incendiado barricadas en los alrededores del estadio, obligando al club a evacuar a los espectadores sólo por el Gol Norte y los laterales.