La Casa Real hizo pública la decisión del Rey emérito de abandonar el país, forzado por los acontecimientos y la necesidad de la institución de reaccionar a todas las informaciones que se han ido conociendo, tras abrir el Tribunal Supremo una investigación por supuesto fraude fiscal y blanqueo de capitales. Después de haberse trasladado el domingo a la localidad pontevedresa de Sanxenxo, lugar en el que practicaba vela en los últimos años, y el lunes a Oporto en coche, ahora se encontraría en República Dominicana, según informan La Vanguardia y ABC.

Todo apunta a que don Juan Carlos habría aceptado la invitación de los Fanjul, una importante familia latinoamericana que ha creado su fortuna gracias a plantaciones de azúcar, a su complejo hotelero Casa de Campo, situado en La  Romana, en República Dominicana.

Su estancia tendrá un carácter temporal, dado que el ex monarca no busca instalarse en este país definitivamente. Así lo aseguró en la carta que le envió a su hijo, el rey Felipe VI, en la que señalaba que este viaje corresponde a su "voluntad de trasladarse, en estos momentos, fuera de España".

Se trata de "una decisión que tomo con profundo sentimiento, pero con gran serenidad. He sido Rey de España durante casi cuarenta años y, durante todos ellos, siempre he querido lo mejor para España y para la Corona", tal y como decía Juan Carlos en la carta que le emitió a su hijo.