El actual episodio de precipitaciones, vientos y crecidas de los ríos que se produce desde hace unos días en Castilla y León han sido motivo, hasta el mediodía de este viernes, de más de 1.000 llamadas atendidas por el 112, del fallecimiento de una persona en León, varias intervenciones para rescatar de sus vehículos o viviendas a personas afectadas por desbordamientos, así como el desalojo de una residencia de mayores en Castrocontrigo. Así ha informado el Centro de Emergencias 112 este viernes, mientras que la Junta ha señalado que un total de 1.353 alumnos de Educación Primaria, Secundaria y Formación Profesional no han podido acudir a sus centros educativos debido a causas meteorológicas.

Concretamente, el 112 ha gestionado alrededor de 800 emergencias, de las cuales, más de 350 han sido por las crecidas y los desbordamientos de ríos y más de 280 estaban relacionadas con las fuertes rachas de viento. En cuanto a las emergencias relacionadas con las crecidas y los desbordamientos de ríos, cabe destacar un incidente luctuoso en Vegas del Condado (León), donde un varón ha fallecido al sufrir una caída con su tractor en las inmediaciones de la presa del río Porma.

Además, se han tenido que gestionar varios rescates. Los primeros se remontan al pasado lunes, 16 de diciembre, también en la provincia de León, concretamente en Garrafe de Torío y Vegacervera donde se auxilió a dos personas bloqueadas en sus vehículos. Otros cinco se han producido en las zonas de Cervera y Aguilar de Campoo, donde se ha rescatado a personas tanto en vehículos como en viviendas.

En Castrocontrigo (León) se ha evacuado una residencia de ancianos por inundaciones en sus instalaciones y el último se ha producido en la provincia de Burgos, concretamente en Covanera, donde, el Grupo de Rescate de Protección Civil ha evacuado a cuatro adultos y tres menores de una vivienda. El resto de emergencias han sido sobre todo desbordamientos de cauces, filtraciones de agua, inundaciones, obstáculos en la calzada, otros peligros de circulación, deslizamientos de tierra o accidentes viales sin heridos.

Por provincias, la más afectada por las crecidas de los ríos ha sido León, donde se han gestionado más de 185 incidentes, en Palencia se han gestionado más de 75 y en Burgos más de 25. Valladolid y Ávila han registrado alrededor de 15 emergencias de este tipo. En relación a las emergencias relacionadas con el viento, la mayoría han sido por obstáculos en la calzada, peligros de circulación, peligro por caída de objetos, daños materiales en vehículos y viviendas o derrumbes de infraestructuras. En este caso, por provincias se han atendido 74 avisos en Burgos, 69 en Salamanca, 31 en Valladolid, 23 en Palencia, 22 en Ávila, 21 tanto en Zamora como en León; 14 en Segovia y 7 en Soria.

A mediodía de este viernes los datos de la Confederación Hidrográfica del Duero mantenían a cerca de 40 ríos con tramos en situaciones de alarma o alerta en todas las provincias. Además, según la Dirección General de Tráfico, se encuentran cortadas debido a las inundaciones hasta 13 carreteras en las provincias de Burgos, León, Palencia, Salamanca y Valladolid. Entre ellas, se incluyen varias de titularidad estatal, se trata de la N-120 a su paso por Melgar de Fernamental (Burgos), la N-623 en Sedano (Burgos) y la N-611 en Canduela (Palencia).