Los últimos datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad, referidos a diciembre de 2019 y difundidos en medio de la pandemia por el coronavirus, son realmente poco alentadores al cifrar en 704.997 las personas que, de media en España, están a la espera de una intervención quirúrgica al situar en 121 días la demora media para ser operado. Son los peores datos de los últimos 17 años y revisten mayor preocupación en unos momentos en que los hospitales han hecho frente a la mayor crisis sanitaria de la historia reciente.

Sin embargo, Madrid ha logrado situarse de nuevo a la cabeza entre las Comunidades en las que los pacientes deben esperar menos tiempo para una intervención quirúrgica o para una consulta externa. Con los datos relativos al pasado mes de junio, según el Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), reduce a 46 días la demora media en los hospitales de alta complejidad -grupo 3- para una intervención quirúrgica. Mientras, la media de demora para consultas externas en los grandes hospitales se sitúa en 37 días.

Madrid obtiene las cifras más bajas en listas de espera del Sistema Nacional de Salud

Un dato destacable es la contribución de los hospitales de gestión mixta del SERMAS a reducir las listas de espera de la Comunidad de Madrid. Un ejemplo claro es la Fundación Jiménez Díaz, gestionado por Quirónsalud y convertido en hospital de referencia durante los momentos más críticos de la pandemia, donde las listas de espera para consultas externas se reducen a 4,4 días para las consultas externas y la demora para intervenciones quirúrgicas es de 9,8 días.

Otro de los centros de gestión mixta, el Hospital General de Villalba, en este caso de complejidad media -grupo 2- repite como centro con menor demora de la Comunidad de Madrid. En el hospital de Villalba los usuarios no esperan más de 8 días para una intervención quirúrgica mientras que para las consultas externas la demora media es tan sólo de 2 días.

Las listas de espera de la Comunidad de Madrid suponen un balón de oxígeno para el Sistema Nacional de Salud y ponen de manifiesto el objetivo prioritario del gobierno regional de reducir las listas de espera.