En una operación contra el tráfico de droga que se desarrolló este miércoles en varios municipios de la provincia de Sevilla un agente de la Guardia Civil se encuentra entre los 16 detenidos en una operación.

Según ha avanzado Diario de Sevilla y han confirmado a EFE fuentes de la Guardia Civil, el agente es uno de los detenidos entre los miembros de una organización que, desde Lebrija, introducía grandes cantidades de hachís por el río Guadalquivir.

En esta operación se han efectuado 16 detenciones y se han intervenido 4.500 kilos de esta droga y 30.000 euros en efectivo, tras iniciarse el pasado septiembre con el nombre de "Falcón".

El agente detenido está destinado en el cuartel de Villamanrique de la Condesa, donde tiene también su vivienda, y en cuyo calabozo está custodiado por sus compañeros a la espera de pasar a disposición judicial.

La organización operaba con tres grupos, uno que recibía los fardos de hachís en la orilla del río, en un terreno de marismas, para lo cual contaba con vehículos todo terreno con remolque, un segundo grupo dedicado a la vigilancia y un tercero que alijaba los fardos en una finca próxima que era empleada como "guardería" y que es propiedad de uno de los cabecillas de la red.

En octubre del año pasado, en el término municipal de Marchena (Sevilla), los agentes interceptaron una furgoneta que portaba 19 fardos con un peso total de 620,700 kilos de hachís.

Esta actuación provocó un parón de la actividad de la organización pero en enero pasado la Guardia Civil volvió a incautarse de 3.900 kilos de hachís que eran portados en dos furgonetas localizadas en la autopista que une Sevilla con Cádiz, en el término municipal de Las Cabezas de San Juan (Sevilla).

Tras esta intervención se efectuaron cinco registros domiciliarios autorizados por el Juzgado número 2 de Marchena en los que, además de los 30.000 euros, se intervinieron seis armas largas de fuego, un remolque, inhibidores de frecuencia, material de comunicación, basculas de precisión y cogollos de marihuana.