Ramón Esono, dibujante ecuatoguineano, acaba de ser puesto en libertad y todos los cargos de los que se le acusaban se le han retirado. Esono ha sido el protagonista de una historia que le llevó a una prisión en su país el pasado 16 de septiembre. Su historia llegó hasta España donde consiguió poner de acuerdo a todos los grupos políticos.

Los portavoces de Asuntos Exteriores de PP, PSOE, Ciudadanos, Podemos y PNV firmaron el pasado 26 de febrero en el Congreso un comunicado conjunto para llamar la atención sobre el caso del dibujante y reclamar para él un juicio justo.

Aunque la justicia de su país aseguraba que le estaban acusando de falsificar dinero, pasaron 82 días desde su detención hasta que se formularon los cargos contra él, sus primeros interrogatorios versaron exclusivamente sobre su obra, la novela gráfica La pesadilla de Obi, muy crítica con Teodoro Obiang, presidente de su país desde hace casi 40 años, y con la situación socioeconómica del país. Por eso los partidos políticos españoles daban por hecho de que se trataba de una condena por ejercer su derecho a la libertad de expresión.