Los principales partidos políticos portugueses han tumbado este viernes en la Asamblea de la República la propuesta del partido animalista PAN para prohibir las corridas de toros. El Parlamento la ha rechazado con 186 votos en contra, 28 a favor y 15 abstenciones. Sólo han votado a favor de la abolición el PAN, el Bloque de Izquierdas, ocho diputados socialistas y un socialdemócrata.

En contra de la medida se han posicionado 66 de los 86 diputados socialistas (otros 12 se han abstenido), 87 de los 89 socialdemócratas, los 18 diputados conservadores del CDS y los 15 del Partido Comunista de Portugal, que apelaron al respeto a las tradiciones. "El PAN no admite que haya otras culturas, sólo admite sus propios patrones culturales. Su propuesta abre un conflicto directo con comunidades enteras. El camino es el del respeto por la identidad cultural, acompañado de una acción pedagógica con los jóvenes sobre el bienestar animal", dijo desde la tribuna la diputada comunista Angela Moreira.

66 diputados socialistas votaron contra la prohibición, 12 se abstuvieron y ocho votaron a favor

El Partido Socialista, al frente del Gobierno, hizo pública su división al respecto, con 12 diputados en la abstención y ocho a favor de la prohibición. Sin embargo, la posición mayoritaria fue la de rechazar el proyecto: "Estamos del lado de la libertad y la tolerancia". El PSD socialdemócrata fue mucho más compacto, así como el CSD: "Estamos contra las prohibiciones y el proyecto condena a toda la gente que vive de esta actividad".

El PAN, partido que ha impulsado la medida, cuenta con un solo diputado en la Cámara, André Silva, que ha dirigido un duro discurso contra la tauromaquia: "Es la exhibición de cobardía más abyecta de la que la especie humana es capaz: el execrable divertimento con la fragilidad ajena". Su posición la respaldó el Bloque de Izquierdas, que apoya la coalición gubernamental: "En estos días no es aceptable la violencia sobre los animales, mucho menos para entretenimiento humano", ha dicho su portavoz, aunque al mismo tiempo ha criticado la falta de planes económicos de la propuesta presentada por los animalistas.