Bajar de peso puede ser una tarea compleja que requiere tiempo y sacrificio, pero existen trucos con los que podrás dar un empujón a tus objetivos saludables. Si bien no puedes dejar atrás tu rutina de ejercicio y una dieta equilibrada, comer a las horas adecuadas es fundamental para activar el metabolismo y quemar grasa.

Según un estudio de la Universidad de Surrey (Reino Unido) adelantar la cena 90 minutos y retrasar el desayuno el mismo tiempo, tarea conocida como restricción de horarios de alimentación (TRF), puede causar cambios fisiológicos muy positivos en nuestro cuerpo.

El estudio, basado en un experimento de 10 semanas con sujetos aleatorios, demostró que los usuarios que participaron rebajaron el consumo calórico y, por tanto, redujeron grasa corporal, aminorando por tanto problemas como la diabetes o el riesgo de obesidad.

Asimismo, en indagaciones previas con animales, los mismos investigadores probaron que, reduciendo a nueve horas el período de ingesta diaria, la masa muscular aumentaba su resistencia. También comprobaron que, sin restricciones horarias de alimentación, la salud de los sujetos se deterioraba al tiempo que aparecía grasa en su cuerpo.

En este sentido, con este estudio se trata de demostrar que comer siempre a la misma hora por la mañana, mediodía y noche tiene efectos positivos para nuestra salud, en el sentido en que, sin momentos de ayuno estricto, el metabolismo no se regulará correctamente. Si comemos a todas horas, en mayor o en menor cantidad, no se activa el complejo enzimático AMPK que regula el consumo de calorías, lo que se traduce en un obstáculo para quemar esos kilos de más.

No es, sin embargo, una dieta sencilla. A ingerir productos saludables y evitar los artículos azucarados, refinados o las grasas saturadas se suma el hecho de tener un estricto horario de comida, lo que es incompatible en muchas ocasiones con la vida laboral o social.

A qué hora tomar el desayuno, la comida y la cena

Por otra parte, según una investigación de la compañía Forza Supplements, existen unas horas en concreto que son ideales para acelerar el metabolismo comiendo alimentos bajos en grasa.

En el caso del desayuno, si no estamos acostumbrados a madrugar tendrás que hacer el esfuerzo para conseguir tus objetivos ya que, de acuerdo con estos profesionales, la hora ideal son las 7:11 horas de la mañana.

El trabajo o las responsabilidades no son compatibles en muchas ocasiones con la hora exacta a la que se debe almorzar para bajar de peso -12:38 horas según el estudio- pero lo que sí debes evitar es comer pasadas las 16:00 horas de la tarde, pues en este momento al cuerpo le cuesta mucho más procesar los alimentos.

Los expertos aconsejan cenar antes de las 19:00 horas para mantener el metabolismo alerta. Pero como se trata de un horario difícil de cumplir -muchos ni si quiera han finalizado su jornada laboral a esa hora- lo ideal es cenar 3 horas antes de dormir para dar tiempo al cuerpo a hacer correctamente la digestión. Si acompañamos la cena de un té verde o una infusión de jengibre y limón, facilitaremos, además, la eliminación de toxinas mientras estamos en reposo.