“En realidad, no tengo un problema con el alcohol. Es la ansiedad lo que me mata. Lo que me hace tomar decisiones violentas y poco meditadas y postergar otras”.

Así comienza Ansia (Planeta), el nuevo libro de Henar Álvarez (Madrid, 1984). Una protagonista ansiosa con una rebeldía explosiva, relaciones abusivas de poder y un deseo sexual irreprimible inundan las páginas de la primera novela de la famosa guionista y humorista madrileña. Después del éxito de La mala leche, Henar atiende a El Independiente para hablar de su libro. A partir de sus personajes y tramas trata de reflejar temas que forman parte de la realidad de muchas mujeres.

La novela comienza con Natalia, la protagonista, destripando a los lectores sus pensamientos sobre su reciente ruptura amorosa: "Ella arranca diciendo, como si fuese la cosa más normal del mundo, que mantiene una relación abusiva con alguien mucho más joven al que puede mangonear y ha dejado 20 veces, y luego tiene la caradura de pensar que él la ha dejado por una más joven guapa, y no, cariño, no es por eso", explica Henar. La autora refleja con naturalidad el problema de las relaciones desiguales. "Lo que yo quería contar era cómo funciona el abuso de poder en todos los estratos de la vida, y para eso creé todos estos personajes, que tienen mucho de mí y mucho de cosas que yo he visto a mi alrededor. Lo que busco es contar historias universales". 

Henar Álvarez.

Detrás de las páginas

Según la autora, Ansia es una obra 100% de ficción pero se ajusta con precisión a la vida cotidiana y a sus problemas estructurales: infidelidades e insatisfacción amorosa, violencia y acoso, hipocresía y redes sociales, maternidad... Henar explica el proceso de creación del manuscrito, un proyecto en ciernes desde el año 2021: "Cuando escribí las primeras páginas de este libro me acuerdo de que fue un momento en el que estaba literalmente hasta el coño de todo, estaba muy harta. Mandé las primeras páginas a mi editora en octubre de 2021 y fue porque tenía la sensación de que todo era estar constantemente haciendo maniobras, todo era cansadísimo, no solo en el terreno laboral sino también en el emocional y el familiar. Me preguntaba, tío, ¿por qué no puedo vivir tranquilamente? Parece que siempre tienes que estar haciendo estrategias y malabares."

"Me decían que era un libro muy visceral, que parecía que estaba escrito desde la tripa"

La mala leche (2020) fue un éxito como novela gráfica ilustrada por Ana Müshell y fue muy bien acogida por el público por la forma de tratar la maternidad y el deseo sexual. Henar ha comentado que ha recibido muy buen feedback por el primer capítulo de Ansia: "Me decían que era un libro muy visceral, que parecía que estaba escrito desde la tripa. Hubo una chica que me puso: tú no escribes con manos, escribes con garras, y me encantó. Yo soy muy pasional y lo soy en todas las facetas de mi vida, e imagino que eso cuando yo escribo también se ve y se transmite".

En cuanto a su inspiración, la autora ha destacado su amor por la escritura y su vocación: "Me ha empujado mi vocación por escribir. Aunque la gente me conozca por los pódcast y la comedia, yo he escrito desde siempre. Escribí mi primer libro y sabía que iba a sacar un segundo, al igual que ahora tengo claro que quiero sacar un tercero. Es algo que disfruto mucho y me hace muy feliz", explica. 

Libertad y deseo sexual

Henar defiende el objetivo de su obra y aquello que pretende denunciar con ella: "Sólo hay una cosa donde sí hay una denuncia clara, que es que los hombres tienen el arma definitiva para destruirnos: nuestra sexualidad. Eso siempre vale para echarte por tierra, y las culpas siempre van a ti".

La rebeldía de la protagonista de Ansia reside en el deseo de explorar su libertad sexual y en crear incomodidad a los que se la han generado a ella: "Recuperé esa sensación adolescente con la protagonista porque había tocado fondo y ella necesitaba volver a encontrar su lugar en el mundo, como si fuese una adolescente que quiere volver a salir a flote".

Henar Álvarez siempre ha sido una defensora de la libertad sexual y ha dibujado paralelismos entre el deseo y el poder. A través de su participación en programas como Buenismo Bien de la cadena SER ha roto con la idea de que las mujeres no pueden hablar de sexo ni de lo que les gusta. Ya en su entrevista con Évole señalaba que "la sexualidad a las mujeres se nos ha arrebatado totalmente", por lo que recupera el deseo sexual y lo lleva al extremo en su nueva obra. 

Son muchos los temas que Henar alcanza y que hacen reflexionar al lector sobre los estereotipos, roles y prejuicios a los que están sometidas las mujeres. "Si todo el rato estamos viendo en las películas que las mujeres cuidan bebés y los hombres trabajan, al final lo que piensas es eso. Te lo van metiendo y metiendo. La cultura genera el pensamiento".

Henar habla de que el objetivo de sus libros, monólogos y pódcast es entretener, pero se plantea la posibilidad de que por el camino pueda contribuir a cambiar los roles de género y los estereotipos: "Creo que cualquier obra cultural que descoloque los roles de género y que ponga a las mujeres fuera de los arquetipos que han dibujado durante siglos para nosotras, genera otros tipos de pensamiento. Y cuantas más obras haya sacándonos de ese rol habitual, todavía será más fácil sacarnos de los roles de género. Ya no para conmigo, sino para cualquier mujer creadora".

Pero este sector no es un camino de rosas para las mujeres. La cómica apunta a las barreras que existen hoy en día para las mujeres que comienzan con proyectos nuevos: "Creo que ahora mismo donde más cuesta empezar y cuesta que las mujeres consigan sacar adelante sus proyectos es en la ficción audiovisual. El número de las mujeres guionistas y directoras sigue siendo muy pequeño. Yo creo que ahora mismo esa es la barrera más difícil de romper". No obstante, Henar discute el poder de los medios de comunicación para dar visibilidad a las creadoras e indica que "ahora los medios de comunicación dan más bola a mujeres escritoras, aunque las ha habido siempre, pero costaba más".

Henar Álvarez.

Encontrar un hueco

La carrera de Henar como humorista es amplia y ha participado en numerosos proyectos como Late motiv, Hoy por hoy o Estirando el chicle. Sobre este último asegura que ha sido "un cambio brutal en el ámbito de la radio" y que "los pódcast y el humor han dado un giro de muchos grados". No obstante, parece ser que aún es complicado que algunos proyectos salgan adelante. "Aunque algo funcione, no lo quieren, incluso a veces lo hacen de manera inconsciente. Ya no porque sea algo polémico, sino porque en su pensamiento está, nos van a comer la tostada" explica.

A pesar de todo, Henar ha conseguido hacerse un hueco entre el público y en redes y ha continuado proyectos como la dirección del pódcast El olimpo de las diosas y otros muchos que demuestran su pasión por la radio. “Para mí es mi vida y me lo ha dado todo. Me gusta muchísimo estar delante de la cámara y del micrófono, hablar, pasárnoslo bien y a la vez cagarnos en todo y hablar de las cosas que nos pasan en nuestro día a día". El videopódcast es donde yo me siento más cómoda y lo siento como mi casa".

"Yo hago comedia universal. Quién me quiera escuchar, bienvenido sea"

Aunque su público es en su mayoría femenino, la humorista aclara: "Yo hago comedia universal. Quién me quiera escuchar, bienvenido sea".  No obstante, Henar no ha estado exenta de críticas. “Hay que centrarse más en la gente a la que le gustamos más que a la que no le gustamos. Prefiero centrarme en la gente que compra mis libros, que escucha mis pódcast y que me oye para seguir trabajando y seguir haciendo el contenido que a mí me gusta y que conecte con la gente."

Después de haber expresado su pasión por la comunicación y la escritura, la autora ha lanzado un mensaje para alentar a todos los creadores de contenido que desean crear nuevos proyectos: "Creo que ahora se busca más que haya contenido de calidad y que tenga personalidad. Encuentra tu voz y la forma personal de contar las cosas, que seguramente es lo que te acaba diferenciando".

Finalmente, Henar Álvarez confiesa lo que más mala leche le genera y de lo que más ansia tiene como profesional: “Lo que más mala leche me da ahora es cuando me contrata gente pero luego no quieren que haga lo que yo hago, y de lo que más ansia tengo es de que la gente compre mi libro y que me digan que les ha gustado. Tengo mucha ansia de saber qué es lo que piensan”.