El Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA está coordinando un proyecto internacional y multicéntrico para desarrollar un asistente de diagnóstico mediante el uso de Inteligencia Artificial (IA) que ayudará a los investigadores, médicos y pacientes a comprender, diagnosticar y tratar la inflamación gástrica crónica que precede al cáncer gástrico.

El proyecto, denominado AIDA (An Artificially Intelligent Diagnostic Assistant for gastric inflammation), que se ha puesto en marcha este mes de enero y está celebrando estos días en INCLIVA su reunión de inicio, tendrá una duración de 4 años y contará con una financiación de más de 7 millones de euros entre fondos europeos y británicos, informa Europa Press.

Tania Fleitas, investigadora del Grupo de Investigación en cáncer colorrectal y nuevos desarrollos terapéuticos en tumores sólidos de INCLIVA y oncóloga del Hospital Clínico Universitario de València, lidera este proyecto con el soporte de la Unidad de Proyectos Internacionales de INCLIVA.

En el proyecto participa un consorcio integrado por 15 centros de excelencia de 8 países europeos, que reúne a un equipo multidisciplinar formado por algunas de las principales autoridades europeas en inflamación gástrica y cáncer (en las especialidades de epidemiología, inmunología, oncología, patología y gastroenterología), expertos en bioinformática, inteligencia artificial y aprendizaje automático y en gobernanza y privacidad de datos, representantes de la administración pública y defensores de los pacientes.

El cáncer gástrico es el quinto tipo de cáncer más común y la tercera causa de muerte oncológica en el mundo en ambos sexos. Afecta a casi un millón de personas y, hasta la fecha, ninguna estrategia ha mejorado el pronóstico de la enfermedad. Causa 783.000 muertes al año y la tasa de supervivencia para pacientes en un estadio avanzado es solo de unos 12 meses.

El cáncer gástrico es el quinto tipo de cáncer más común y la tercera causa de muerte oncológica en el mundo en ambos sexos

De hecho, aunque el tratamiento actual es multimodal e incluye cirugía, quimioterapia y radioterapia para mejorar el control loco-regional y lograr una disminución de la tasa de diseminación tumoral, los avances siguen siendo limitados y son necesarias más acciones en prevención primaria y secundaria.

La mayoría de los casos de cáncer gástrico se detectan en una etapa tardía, por lo que diagnosticar a las personas con riesgo de desarrollar cáncer gástrico en la etapa presintomática podría mejorar significativamente su pronóstico.

Existen muchos datos disponibles sobre los factores que intervienen en la probabilidad de que una persona desarrolle cáncer gástrico. Individualmente ninguno de ellos ofrece una evidencia sólida, pero combinarlos y correlacionarlos proporcionaría una imagen mucho más clara.