Movimiento de calado en el sector eléctrico español. La petrolera francesa Total se convierte en una de las grandes eléctricas de España con la compra de activos a la portuguesa EDP. La compañía gala compra dos centrales de gas y la comercializadora de luz, con más de dos millones de clientes, por 515 millones y se erige en la cuarta mayor eléctrica del país, sólo por detrás de Endesa, Iberdrola y Naturgy, y por delante de Repsol.

Total pasa a controlar dos centrales de gas (ciclo combinado) en Castejón, en Navarra, con 843 megavatios de potencia. Y también pasa a convertirse en una de las grandes comercializadoras de electricidad con 2,5 millones de clientes, con la toma el control del negocio de mercado libre de 2,1 millones y la participación del 50% en CHC Energía, la comercializadora que EDP y Cide compartían a partes iguales, con 400.000 clientes más.

La francesa Total entra de lleno en el mercado eléctrico con una cuota del 12% y sigue los pasos de otras petroleras como Repsol, Cepsa y Galp que han sacudido negocio eléctrico con su entrada como comercializadoras de electricidad y de gas natural. La adquisición complementa la entrada de Total en el mercado español de energía solar en febrero con la compra de una cartera de proyectos fotovoltaicos con 2.000 MW y que esta´ran listos en 2023.

El consejero delegado de Total, Patrick Pouyanné, destaca que la compra de activos de EDP permitirá a la petrolera "convertirse en uno de los principales actores del mercado energético español, desde la importación de GNL hasta la producción de electricidad a partir de renovables y gas, así como la venta de gas y electricidad".

EDP da un salto de gigante en su estrategia de desinversión en España incluida en su plan estratégico 2019-2022. Apenas un año después de la presentación del plan, EDP ya ha cumplido el 65% del objetivo total fijado de venta y rotación de activos con un impacto positivo en la deuda neta de la compañía.

EDP subraya que mantendrá más del 95% del resultado bruto de explotación (ebitda) de España tras la operación, ya que mantiene su negocio de renovables, las redes, de grandes clientes empresariales y nuevos productos downstream. EDP prepara en España nuevas plantas renovables, la transformación del grupo 1 de la central de carbón de Aboño (Asturias) para quemar gases de acería como fuente de generación eléctrica, se compromete a mejoras en redes eléctricas y una amplia oferta de servicios a empresas, segmento en el que mantiene una relevante cartera comercial.

En España, el Grupo EDP, que seguirá dando empleo directo a más de 1.550 personas, es referente en el mercado energético, presente en la generación con más de 4.600 megavatios (MW) de potencia instalada, 668.500 puntos de suministro en distribución y una cartera de comercialización de energía eléctrica, gas natural y servicios de más de 14.000 megavatios hora (TWh), sin incluir los clientes domésticos de los que ahora se desprende.