Cristiano Ronaldo sigue reescribiendo la historia, no solo en los campos de fútbol, sino también en el ámbito económico. Su reciente renovación con el Al-Nassr saudí no es una extensión de contrato cualquiera; se ha convertido, de facto, en uno de los acuerdos más lucrativos y sorprendentes en la historia del deporte. Las cifras que rodean este nuevo compromiso son, cuanto menos, mareantes, consolidando al astro portugués como una máquina de generar ingresos.

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El capitán de la selección portuguesa, que se unió al Al-Nassr a finales de 2022 tras su salida del Manchester United, ha extendido su vínculo hasta junio de 2027. Sin embargo, lo realmente impactante son los términos financieros. Este nuevo acuerdo le asegurará una cifra que ronda los 200 millones de euros anuales. Sí, 200 millones de euros. Esta cantidad incluye no solo su salario como jugador, sino también importantes sumas por derechos de imagen y acuerdos comerciales, convirtiéndolo en el deportista mejor pagado del mundo con una diferencia abismal.

Un salario de locura: detalle de las cifras

Desglosar esta cifra puede ayudar a comprender la magnitud del acuerdo. Si calculamos esos 200 millones de euros, Cristiano Ronaldo estaría percibiendo alrededor de 16.6 millones de euros al mes, lo que se traduce en aproximadamente 4.1 millones de euros por semana. Llevado a una escala diaria, su ingreso sería de unos 571.000 euros, superando los 23.700 euros por hora (más de 395 euros por minuto).

Este acuerdo trasciende lo puramente salarial. El Al-Nassr ha apostado fuerte por Ronaldo no solo como jugador, sino como embajador. Se rumorea que parte de este contrato incluye una significativa prima de fichaje. La idea es que Cristiano no solo lidere al equipo en el campo, sino que sea la cara visible de la Liga Saudí, atrayendo más talento y visibilidad al fútbol de la región.

Según afirma Bein Sports, además de este contrato multimillonario, Ronaldo tendría una serie de objetivos por los que también generaría dinero: Por cada gol del portugués, el club le pagará 90 mil euros. En caso de ganar la Saudí Pro League, sería una cantidad cercana a los 8 millones, y si consigue la Champions Asiática, se embolsaría 6 millones de euros. A todo eso se le suman los más de 50 millones de euros garantizados en patrocinios y derechos de imagen.

Más allá del campo: embajador y atractor de inversión

La presencia de Cristiano Ronaldo en Arabia Saudita ha sido un factor clave para el crecimiento de la Saudi Pro League. Desde su llegada, la atención mediática sobre el fútbol saudí se ha disparado. Su nuevo contrato no solo recompensa su impacto deportivo, sino también su rol como promotor y embajador de la liga y del país en general, especialmente en la ambición de Arabia Saudita de convertirse en un actor principal en el deporte mundial, incluyendo la posible candidatura para la Copa del Mundo.

Este tipo de inversión en una figura del calibre de Cristiano Ronaldo demuestra la seriedad con la que el fútbol saudí está desarrollándose. La presencia de 'CR7' ha abierto la puerta a que otras estrellas europeas como Benzema o Sadio Mané lleguen a esta liga y eleven su nivel competitivo. El Al-Nassr, en particular, ha visto cómo su perfil de club se ha catapultado, atrayendo nuevos patrocinadores, fans y oportunidades de negocio.

El objetivo de Cristiano Ronaldo

La longevidad deportiva de Ronaldo, a sus casi 40 años, es un factor en este contrato. Jugar hasta los 42 años en la élite del fútbol, aunque sea en una liga emergente, es un testimonio de su disciplina y dedicación. Se prevé que el astro portugués no se retire, mínimo, hasta conseguir marcar 1.000 goles. Actualmente lleva 938, y si analizamos sus últimas temporadas, puede que este hito llegue antes de que termine su actual contrato.

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