En un momento crucial de su vida, Sara Carbonero ha compartido una profunda reflexión con sus seguidores. La periodista y escritora describió esta etapa como una "época de silencio a todo volumen", en la que ha decidido bajar el ritmo. Conocida por su discreción, Carbonero ha hecho una pausa consciente en su exposición pública para priorizar el bienestar de su cuerpo y mente en este periodo del año.

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Según informa la agencia Europa Press, en una publicación reciente en Instagram, la expareja de Iker Casillas admitió que está en un lugar que "no requiere testigos pero sí tiempo". Reconoce que está dejando de lado la presión de ser siempre productiva, inspiradora o una "ser de luz". Su meta, según confesó, es simplemente "ser", algo que le está sentando muy bien y le permite incluso olvidarse de las redes sociales. La periodista aseguró que disfruta cada vez más de escuchar a los demás y rodearse de personas que la animan a creer más en sí misma.

Sara confesó que mantener una imagen pública no siempre es fácil, especialmente cuando por dentro estás "colocando todo". Por eso, dice haberse alejado del foco para abrazar la simplicidad del día a día y agradece el apoyo de sus amigas más cercanas durante este periodo de introspección.

Como parte de este proceso de autocuidado, Carbonero ha pasado unos días en Cádiz, su lugar favorito en verano. Allí asistió a un concierto de Miguel Bosé con sus amigas, sumando momentos de tranquilidad y música a esta etapa de reflexión. Al mismo tiempo, destaca la importancia de las personas "de siempre, de antes y de ahora", y de encontrar el equilibrio entre la rutina, la paz y las pequeñas cosas que de verdad importan.

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